Un grupo de abogados laboralistas se esconde en una casa cuando se produce el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 en el Estado español. Sin saber muy bien qué hacer, discutirán entre huir del país, permanecer escondidos a esperar acontecimientos o intentar hacer algo para defender la joven democracia española.

El director y guionista Guillermo Rojas utiliza la comedia para narrar la historia de este grupo de abogados: «Hice un primer planteamiento algo más serio, que no me acababa de cuajar. Yo tenía en mi mente hacer algo de comedia clásica, tipo Lubitsch o Billy Wilder. Pero hay dos películas que para mí son cruciales, en el sentido de que creo que se puede hacer algo parecido a lo que los cineastas hicieron en esas películas. Una es la película sueca ‘Juntos’, de Lukas Moodysson (2000); trata sobre una comuna hippie en los años 70, que arranca cuando se enteran por la radio que Franco ha muerto. Y entonces eso les provoca mucha alegría, no una pequeña satisfacción, sino como un golpe de suerte, algo bonito, Y está basado también en los recuerdos infantiles del director que se crió en una comuna como esa. Es una película muy tierna, tiene muchas cosas del cine de Campanella y también es una reflexión sobre la izquierda y su pensamiento crítico, pero a la vez es jugosa y hay enredo entre parejas. La vi cuando tenía 18 o 19 años y pensé, con todo lo del golpe de Estado de mis padres, igual se puede hacer algo así, ¿no? Y la otra película es la comedia Borja Cobeaga, ‘Fe de etarras’ (2017)», comenta el director.