Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
PROBLEMAS EN LAS OBRAS DE LA «Y VASCA»

El túnel de Asteasu del TAV ha secado tres regatas definitivamente

Es como si a una bañera le quitaras el tapón y se vaciara. El túnel de Asteasu del tramo Hernialde-Zizurkil del TAV ha hecho que el agua que debía correr por tres regatas de la zona salga por su boca, lo que ha provocado un descenso del nivel freático, y esto hace temer a técnicos en la materia que esos riachuelos se hayan secado ya para siempre.

Se sabía que las obras de la llamada «Y vasca» en la zona de Tolosaldea habían provocado el secado de varias regatas y manantiales. Por ejemplo, la desecación en Fraisoro ha llevado a que la granja-escuela, una residencia y varios caseríos del entorno tengan que ser abastecidos de agua a través de cisternas y depósitos. Lo que GARA ha conocido ahora es que muchas de esas afecciones serán ya permanentes, salvo que se acometa una costosísima obra de impermeabilización no solo del túnel de Asteasu, sino del entorno que atraviesa.

Según ha sabido este diario, el mencionado túnel de Asteasu, el más largo de los tres que componen el tramo Hernialde-Zizurkil del TAV, ha desaguado prácticamente el terreno que perfora. Desde el inicio de las obras se detectó que había una afluencia de agua excepcional, hasta el punto de que ha bajado el nivel freático de la zona y varias regatas y manantiales se han secado. El agua que antes corría por ellos escapa ahora por la boca el túnel.

Esto ha supuesto una alteración de toda la red de drenaje de aquellos terrenos y una desorganización de la red de aguas de escorrentía en el área de Anoeta, Asteasu, Irura y Zizurkil.

Los datos que obran en poder de este diario señalan que la regata de Sorgintxulo ha estado totalmente seca desde mayo de 2014 hasta diciembre de 2015. Con las lluvias del invierno, tiene momentos en los que recupera un poquito de corriente, pero en cuanto deja de llover, antes de una semana ya vuelve a secarse. Esto se debe a que, como se ha dicho, el nivel freático ha descendido, quedando el cauce de la regata por encima del mismo. La desecación del riachuelo provoca al mismo tiempo, y esto se irá notando con los años, la desaparición del ecosistema asociado al mismo.

También se ha secado un tramo de cerca de un kilómetro de la regata Ugarte, justo el que está encima de la zona central del túnel de Asteasu. No se ha secado todo su recorrido porque es la regata más larga de la zona y la que tiene una mayor cuenca y recibe agua de manantiales que están fuera de la afección.

En el tramo desecado está el manantial de Fraisoro, que abastecía a varios caseríos y edificaciones. Dejó de dar agua en junio de 2014 y no ha vuelto a recuperar caudal ni en los momentos de mayores lluvias.

La regata de Akolai también se ha visto afectada en su parte alta, aunque en menor medida.

Paradójicamente, el agua que sale del túnel de Asteasu ha provocado un incremento del caudal de la regata Alkiza, para lo que tampoco había una previsión ajustada.

Afección medioambiental

Cuando comenzó a detectarse el problema, los responsables de las obras iniciaron la construcción de varios pozos piezométricos a fin de analizar cuál era el nivel freático en esos puntos, y los gráficos indican un descenso constante en todos ellos. Cuando llueve de manera intensa se observa un leve incremento, que vuelve a caer cuando deja de llover.

Esto viene a demostrar, en opinión de técnicos consultados, que, salvo una intervención urgente y muy costosa, la desecación de esas regatas será ya permanente, con la consiguiente afección medioambiental que ello tendrá en todo ese entorno.

 

El proyecto no contemplaba la alteración del nível freático

El proyecto de obra del túnel de Asteasu preveía medidas de protección y de depuración relacionadas con las aguas procedentes de la perforación de los túneles –aunque no en la cantidad en la que se está produciendo– y también para controlar la calidad de los recursos hídricos subterráneos que se vieran afectados por los trabajos de perforación. Pero en ningún caso contemplaba que pudiera bajar de esta manera el nivel freático y, por lo tanto, no se tomaron medidas para prevenir que esto ocurriera y corregir los efectos producidos por la desorganización de toda la escorrentía superficial del lugar.

Según profesionales consultados por este diario, existen técnicas que permiten prevenir este tipo de problemas, en base a crear pantallas impermeables con la inyección de resinas, para evitar ese efecto de bañera a la que se le quita el tapón que se ha producido en este caso. Achacan a una falta de estudios previos suficientes que no se hubiera podido anticipar lo que ha acabado ocurriendo.

Si esta técnica encarece el proyecto, mucho más lo hará solucionarlo ahora que el túnel está excavándose. La fórmula es muy similar, solo que las resinas deberían inyectarse desde el túnel hacia los terrenos que lo rodean.

Según algunas estimaciones, esto podría tener un coste similar a toda la obra del túnel, por lo que no creen que el Gobierno de Lakua lo acometa, lo que hará que la afección a la zona sea ya permanente.I.I.