Ramón SOLA
ARNALDO OTEGI EN EL LABRIT DE IRUÑEA

ESCUCHAR PARA MEJORAR, EXPLICAR PARA CONVENCER... Y LUCHAR PARA GANAR

Del Anaita en 2009 al Labrit en 2016. Arnaldo Otegi dijo entonces que la izquierda abertzale nació para ganar y ayer volvió a Iruñea para insistir en esa pasión, que se expresa en retos a corto, medio y largo plazo: llevar a Madrid a Bakartxo Ruiz, lanzar un proceso independentista, sacar a los presos.

Arnaldo Otegi
Arnaldo Otegi

Para un optimista reconocido como Arnaldo Otegi, hablar en Iruñea tenía ayer algo de jugar en casa, porque en ningún sitio han avanzado las cosas estos seis años tanto como en Nafarroa. Pese a ello, decidió remarcar que «tenemos motivos para estar contentos aquí, donde hemos puesto el régimen patas arriba». Una hora más tarde, al despedirse ante un auditorio que le acogió con mucho cariño, volvió al mismo concepto: «Vamos a construir un Estado que garantice a la gente sus necesidades básicas. Y somos felices luchando, porque la felicidad no es acumular cosas, sino el cariño popular, eso no se compra».

El ciclo «Escuchar para mejorar» fue abierto en Iruñea por Otegi con un acto que llenó toda la parte inferior y la cancha del Labrit, además de parte del primer piso: unas 1.500 personas. Le seguirán otras reuniones similares en el resto de herrialdes. Durante hora y media, respondió a preguntas sobre cómo ve el futuro del país, las próximas elecciones, el bloqueo en torno a las consecuencias del conflicto... Entre quienes las formularon había una pensionista, un vecino de Corella, una migrante y feminista, la madre de dos presos, una de las 52 personas que han logrado acuerdos en juicios políticos, una joven escéptica ante las elecciones... Sus intervenciones ocuparon prácticamente la mitad del tiempo, pero tras escuchar Otegi además habló, para remarcar algunos de los conceptos que viene sembrando desde Logroño, Elgoibar, el Velódromo, el Kursaal, Londres, Barcelona...

Habló para convencer. Por ejemplo, de la necesidad de valorar los avances que se consiguen, y que esta semana tenían una referencia clara en dos nuevos acuerdos judiciales. Fue Rosa Iriarte, una de las militantes que lo firmó en Madrid, la que le pidió opinión, y Otegi no se quedó en medias tintas: «El objetivo del Estado ha sido siempre destruir al independentismo. A veces no somos conscientes del terreno que hemos ganado. ¿Por qué están dispuestos ahora a hacer acuerdos? ¿Qué han ganado ellos ahí? ¿Un papel? –se preguntó. Y prosiguió:– Yo estoy muy contento de que la gente no vaya a la cárcel, porque todos somos necesarios para poner en marcha el proceso independentista. Lo que nunca firmaremos al Estado es que no vamos a luchar, eso nunca».

Sobre el mismo asunto, apuntó que el problema para entender algunos pasos es que «el tema de los presos no se puede analizar de manera aislada. No aceptamos la legalidad porque nos la impone el Estado, no. Lo hacemos mirando a nuestro pueblo. Si logramos abrirle un segundo frente al Estado [junto al catalán], y yo soy firme partidario de ello, serán más activos para ese pueblo en marcha».

La gente y las elecciones

Para los próximos meses Otegi marca el reto principal de ir haciendo una hoja de ruta basada en las preocupaciones populares «y no al revés. Hay que construir la agenda desde la gente». ¿Y cómo se hace eso? «Con modestia, humildad, respeto, amabilidad... –enunció–. Intentando convencer a la gente y que la gente siempre tome la última decisión». En este punto abordó un tema de moda: la relación entre instituciones y movimientos sociales. Consideró que hay que restar dramatismo a la crítica «porque ser criticados nos hace mejores», pero al mismo tiempo alertó contra el riesgo contrario de pensar que todo se puede hacer desde las instituciones: «Es un error pensar que porque gobernamos el 100% de la gente comparte lo que pensamos, y es otro error buscar atajos a través del Boletín Oficial». «Ganar las elecciones no es ganar el poder», avisó dos veces.

Ningún sitio mejor para recordarlo que Nafarroa, donde Arnaldo Otegi apuntó que el régimen derrocado mantiene todavía muchos resortes en la judicatura, los medios o el ámbito económico. Y es ahí donde cobran mayor valor las elecciones, sobre las que también fue muy rotundo: «Por un lado, porque soy de la vieja escuela, así que cuando se toma una decisión [participar], no se discute al día siguiente. Y si salimos al partido, salimos a ganar», añadió.

Recordó que vivió en su celda la noche electoral del 20D y que allí oyó a Javier Esparza (UPN) destacar no lo más evidente, que era la irrupción de Podemos, sino que no habría un solo parlamentario abertzale en Madrid. «Apelo a que ahora sí lo logremos con Bakartxo. ¿A qué no sacamos?», dijo en tono de broma, sabiendo que en Nafarroa funciona especialmente bien el reto como factor movilizador. Si escuchar para mejorar era el anunciado del acto, Otegi le aportó un segundo ingrediente de convencer explicando y este tercero de propina imprescindible: creer, y luchar, para ganar.

Arropada por el resto de candidatas, la cabeza de lista al Congreso, Bakartxo Ruiz, había seguido el acto junto a Otegi y le cogió ahí el testigo para remarcar la ambición ante el 26J: «Este partido lo vamos a jugar. Y a quienes nos dicen que lo tenemos difícil, les respondemos ‘ezina, ekinez, egina’. Ésa será la actitud que utilizaremos. También nos decían que era muy difícil echar al régimen e impulsar un cambio... Solo nosotros y nosotras nos lo creíamos».

Antes de concluir al grito de «Gora Nafarroa berria!», Ruiz dejó claro, «para que no haya ninguna duda, que si hay la mínima oportunidad de echar a Rajoy lo vamos a echar. Y de revocar la Lomce, la Ley Mordaza, el artículo 135 de la Constitución...» Su deseo se tornó «sueño» en boca de Otegi, que planteó a los 1.500 del Labrit: «¿Os imagináis que el próximo Gobierno español dependiera del independentismo vasco y que echemos a patadas a los fascistas?».

Durante hora y media hubo ocasión de hablar de feminismo, del euskara, de equilibrio territorial… También de EH Bildu, que se puso en valor en el diálogo con Miren Aranoa. El evento tuvo algo de acontecimiento por el reencuentro de Otegi con Iruñea y de Iruñea con Otegi, con elogios mutuos. Ruiz recordó que el PP lleva el lunes a la Mesa y Junta del Parlamento una moción de condena de la decisión del Parlament de recibirle el miércoles: «Pues si no querían taza, aquí tienen taza y media», replicó.

 

Declaraciones

«A veces no somos conscientes del terreno que hemos ganado. ¿Por qué están dispuestos

ahora a hacer acuerdos?»

«En las apuestas políticas no suele ser posible ganar el 100%, pero sí perder el 100%»

«A la izquierda abertzale le asesinaron un diputado, nos tirotearon los fascistas, no les hace ninguna gracia que estemos allí»

ARNALDO OTEGI

«A quienes dicen que lo tenemos difícil, también decían que era muy difícil echar al régimen, solo nosotros y nosotras nos lo creíamos»

BAKARTXO RUIZ