GARA
CIUDAD DEL CABO

Sudáfrica estudiará si sigue en el TPI tras las críticas por no detener a Bashir

El Ejecutivo de Sudáfrica revisará su pertenencia al Tribunal Penal Internacional (TPI) tras las críticas internacionales al Gobierno por negarse recientemente a detener al presidente de Sudán, Omar Hasan al Bashir, sobre el que pesa una orden internacional de arresto.

«El Consejo de Ministros ha decidido que revisará la participación de Sudáfrica en el Estatuto de Roma del TPI», ha afirmado el ministro de la Presidencia, Jeff Radebe, tras una reunión del Ejecutivo de Jacob Zuma en la capital sudafricana, Pretoria.

Asimismo, Radebe ha manifestado que el Gobierno solo abandonará el tribunal como «último recurso. Una decisión de este tipo solo será tomada cuando Sudáfrica haya agotado todas las opciones disponibles», ha agregado.

Omar Hasan Al Bashir abandonó suelo sudafricano tras participar en una cumbre de la Unión Africana (UA) a pesar de que un tribunal del país anfitrión le había prohibido que saliera de Sudáfrica atendiendo una petición del TPI, que ha acusado el presidente sudanés de crímenes de guerra y contra la Humanidad en relación al conflicto de Darfur.

«El TPI decidió que Sudáfrica estaba obligada a detener a Al Bashir sin consultarlo de forma apropiada», adujo el ministro. «El tribunal debería haberse tomado este asunto con más seriedad y propiciar que todas las partes negociaran de buena fe», añadió Jeff Radebe.

Desde la emisión de la orden de arresto en 2009, el presidente sudanés ha viajado sobre todo a países que no han firmado el Estatuto de Roma y por lo tanto no integran el TPI, aunque también ha puesto pie en países firmantes que se han negado a efectuar la detención.

Al Bashir considera que la orden de arresto del TPI es un acto de persecución «colonialista». En diciembre de 2014, el mandatario se vanaglorió de la paralización temporal de la investigación del tribunal sobre su persona por la falta de cooperación del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, según denunció el organismo.

A comienzos de este semana, el secretario general del gobernante Congreso Nacional Africano (ANC), Gwede Mantashe, aseguró que el TPI es «peligroso» y Sudáfrica debería retirarse de él.

El Gobierno de Pretoria debe entregar un documento oficial al TPI explicando por qué dejó marchar a Al Bashir, pero los observadores no esperan que su contenido se haga público de forma inmediata.