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El mundo clama contra la masacre pero Israel sigue bombardeando

El Ejército israelí mató ayer a ocho palestinos en diversos bombardeos y ataques (trece desde que se acabó la tregua), a pesar de que decenas de miles de personas salieron a la calle en todo el planeta para exigir el fin del «genocidio».

Unas 15.000 personas se manifestaron ayer en Santiago de Chile para solidarizarse con la población palestina de Gaza y para demandar al Gobierno de Chile que rompa relaciones con el Estado israelí. «Chile no puede ser cómplice de un Estado genocida», dijo a los periodistas Tarik Lama, dirigente de los palestinos residentes en Chile.

En el país sudamericano vive la comunidad palestina más numerosa fuera de Oriente Medio, de unas 400.000 personas, resultado de una inmigración iniciada en la segunda década del siglo XX y compuesta casi exclusivamente por cristianos.

Los manifestantes, convocados por la comunidad palestina residente, organizaciones de derechos humanos y federaciones de estudiantes, marcharon por la principal avenida de la capital chilena y exigieron un alto el fuego inmediato en Gaza.

El Gobierno de Chile convocó esta semana a consultas a su embajador en Israel y ha emitido varios pronunciamientos pidiendo el fin de los ataques «desproporcionados» del Ejército israelí contra la población civil de Gaza. También ha condenado el lanzamiento de cohetes contra el territorio israelí por parte de la resistencia palestina.

Como en Santiago, en docenas de ciudades de todo el planeta los manifestantes expresaron su repulsa a la agresión israelí y a su impunidad.

Más de 30.000 sudafricanos marcharon por las principales calles de Ciudad del Cabo para exigir el fin de la agresión bélica israelí. Los manifestantes portaron pancartas con frases de denuncia al régimen sionista y en respaldo a los palestinos.

Varias manifestaciones fueron organizadas en ciudades francesas con el mismo fin: además de París, ciudades como Marsella, Estrasburgo, Lille, Lyon, Dijon, Nantes, Angers, Orléans, Quimper y Vannes vivieron protestas antiisraelíes.

Durante el acto de solidaridad, el Frente de Izquierda aseguró que «desde hace siete años el pueblo de Gaza está sometido a un bloqueo inaceptable y a las agresiones bárbaras de Israel, que viola impunemente el derecho internacional y no respeta ninguna de las resoluciones de la ONU después de 1948».

En Pakistán, los manifestantes salieron a las calles portando banderas de Palestina y gritando consignas en contra del régimen israelí.

En Cisjordania, los palestinos cuestionaron el silencio de los países árabes respecto a las atrocidades cometidas por Israel.

Manifestantes británicos se reunieron ante la sede de la cadena de noticias BBC en Londres para denunciar su «cobertura tendenciosa» a la masacre del pueblo palestino.

Incluso Tel Aviv fue escenario de una marcha «contra la masacre» y a favor de poner fin al bloqueo contra la población de Gaza. Eran cien manifestantes.

Tel Aviv cree que necesitaría cinco años para ocupar la Franja de Gaza

El primer ministro Netanyahu, habría amenazado a sus propios ministros con invadir Gaza, lo que requeriría un esfuerzo militar de cinco años, según informaciones periodísticas. A preguntas de Netanyahu, expertos del Ejército israelí expusieron al gabinete ministerial el coste de la hipotética ocupación de Gaza. Debido a ese informe, los ministros quedaron aterrorizados y renunciaron definitivamente a la idea de invadir el enclave palestino.

El diario «Ha'aretz» señaló que la retirada de la Franja de Gaza se produjo tras una reunión del gabinete en la que expertos del Ejército avisaron sobre las graves pérdidas financieras y humanas que sufriría Israel en caso de otra invasión. Citando a ministros, el periódico prosiguió: «Netanyahu quiso, a cualquier precio, convencer a los ministros de que rechazaran esta opción. Ellos calificaron la reunión de `sesión dominada por escenarios de terror'». La reunión duró más de cuatro horas y tuvo lugar en presencia de altos responsables del Ejército y del servicio de seguridad interior. Los militares afirmaron que todas las viviendas de Gaza estaban minadas y que las calles estaban llenas de trampas y artefactos que esperaban a los soldados israelíes.

¿Cuánto tiempo haría falta para ocupar Gaza? Los expertos avanzaron la cifra de al menos 5 años y una suma de más de 3.000 millones de euros para que Gaza fuera «puesta bajo control».

La segunda cadena de televisión israelí difundió un reportaje en el que dio más detalles: «Si los dirigentes políticos hubieran dado la orden de ocupar Gaza y desmantelar a Hamas, esto habría llevado a la muerte de centenares, o quizá miles de soldados israelíes, y el secuestro de varias decenas más». GARA