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RANGÚN

La ONU califica de limpieza étnica el trato a los rohinyás en Myanmar

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos afirmó que el trato que Myanmar da a los rohinyás se asemeja a un clásico ejemplo de limpieza étnica. A las voces críticas con la gestión de la Premio Nobel de Paz y líder de facto del país, Aung San Suu Kyi, se sumaron ayer el dalai lama, la UE y Alemania.

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, denunció ayer «la brutal operación de seguridad» puesta en marcha por las autoridades birmanas contra los rohinyás. Afirmó que el trato que Myanmar da a esta minoría musulmana se asemeja a «un ejemplo de limpieza étnica». En su discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, afirmó que la operación militar en el estado de Rakhine es «claramente desproporcionada» frente a los ataques de insurgentes rohinyás registrados a finales de agosto.

El Consejo de Derechos Humanos creó el 24 de marzo «una misión internacional independiente» para investigar la violencia cometida por miembros del Ejército contra esta minoría musulmana apátrida, pero Myanmar no autorizó a los expertos a viajar a la zona.

«Dado que Myanmar rechazó el acceso de los investigadores especializados en derechos humanos, no se puede realizar enteramente la evaluación actual, pero la situación parece ser un ejemplo de libro de limpieza étnica», declaró en la apertura de la 36 sesión del Consejo de Derechos Humanos.

«Recibimos múltiples informes e imágenes de satélite que muestran a las fuerzas de seguridad y a las milicias locales incendiando pueblos rohinyás, así como informaciones coherentes que dan cuenta de ejecuciones extrajudiciales, incluso disparos contra civiles que huyen. Esta operación es claramente desproporcionada y no toma en cuenta los principios fundamentales del derecho internacional», subrayó Al Hussein.

A las voces críticas con la gestión de la Premio Nobel de la Paz y líder de facto de Myanmar, Aung San Suu Kyi, se sumaron ayer la Unión Europea, el dalai lama y el Gobierno alemán. La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Maja Kocijancic, reclamó a Suu Kyi prestar una «atención máxima e inmediata» a la situación de los rohinyás. El líder espiritual de los budistas también le pidió por carta que «intente restaurar relaciones serenas en la población», mientras que el portavoz de la Cancillería alemana, Steffen Seibert, le instó a «cumplir con su responsabilidad ante todos los grupos de población» de Myanmar.