Saski Baskonia afronta un importante partido de Liga ACB este domingo a las 18.00 en el Palau Blaugrana. Perder en la cancha del Barça no es una opción descabellada, pero lo cierto es que podría convertirse en un contratiempo complicado de cara a garantizar su presencia en la Copa ACB. Con ocho triunfos, aunque con un partido más que la mayoría, los gasteiztarras están en el Top 8 de la Liga ACB, pero en caso de perder, los de Dusko Ivanovic afrontarán las jornadas finales de la primera vuelta –Girona fuera de casa y Real Madrid en Zurbano– con la práctica obligación de ganar ambos partidos.

El Barça, con todo, llegará al choque del domingo con dos duros golpes sobre su lomo, acumulados esta semana, en forma de derrotas en su propio feudo. Los pupilos de Roger Grimau cedían por 82-83 ante Baxi Manresa el miércoles, de forma que, aunque estén en la parte alta clasificatoria con nueve triunfos en su haber, todavía no han garantizado su presencia en Málaga y buscarán congraciarse con sus aficionados.

Unos aficionados que este viernes se volvieron a llevar otro chasco, ya que los blaugrana  cedieron con todas las de la ley ante un Armani Milano que sumó su quinto triunfo de la temporada, de forma que se aleja de las dos última posiciones de la tabla, que ahora mismo ocupan Alba Berlín y Asvel Villeurbanne, con dos triunfos por cabeza.

Confianza a pesar del último pinchazo

En este estreno suyo como primer entrenador del Barça, Roger Grimau alterna momentos de brillantez y otros de gran espesura, y da la impresión que el domingo Saski Baskonia se enfrentará a un equipo en un momento bajo, por más que está en la cuarta plaza de la Liga ACB y segundo de la Euroliga. Ha perdido sus dos últimos partidos de la Liga ACB –Manresa y Zaragoza– y también en dos de sus tres últimos duelos europeos –Virtus Bolonia y Armani Milano–. Sus infinitos recursos físicos y de juego le pueden dar opciones para romper este mal momento, pero tampoco hay que olvidar que la entidad blaugrana ya ha recibido en sus carnes una dolorosa paliza frente a Saski Baskonia, cuando, liderados por Codi Miller-McIntyre y Markus Howard los de Dusko Ivanovic se llevaron la victoria por 94-71.

El Baskonia por su parte atraviesa un buen momento a pesar de la última derrota en Euroliga ante Virtus, que puso en evidencia la falta de otro director de juego, visto el papel que juega Nico Mannion, llamado a tener otro rol más importante a principio de temporada.

Los de Dusko Ivanovic deberán prestar atención a los numerosos flancos abiertos que tienen los catalanes con gran amenaza exterior y poderío, en una pintura plagada de estrellas, con más fondo de armario que los baskonistas.

Michael Caicedo y Matt Costello serán a priori las bajas en uno y otro equipo para un partido que podría decidirse en la defensa, pues se miden dos de los equipos más anotadores de la liga.