La mayoría que conforman los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Getxo han aprobado este jueves una moción del PP en la que se insta a la creación de una comisión especial de investigación sobre el derribo irregular del palacete Irurak Bat. Se aboga en la iniciativa por que la dirija un edil de esos partidos y en ella comparezcan técnicos y otras personas que puedan ayudar a esclarecer lo sucedido en ese polémico caso.

Por encima de las diferencias y conscientes de que se trata de un mero pronunciamiento político que no obliga al Gobierno municipal de PNV-PSE a que lo lleve adelante, han reclamado a la alcaldesa, la jeltzale Amaia Agirre, y a su partido que no pongan «obstáculos» a aclarar lo sucedido en aras a la «transparencia».

A pesar de los reproches, que no han faltado de nuevo, los votos de PP, EH Bildu y Elkarrekin Podemos han aprobado una moción que tiene un mero valor testimonial pero que ha dejado solo al PNV en la gestión que está haciendo del derribo del edificio de San Nicolás 11.

Hasta sus socios del PSE, en boca de su portavoz Carmen Díaz, han reconocido que no comparten la manera de proceder de los jeltzales, al no responder Inazio Uriarte Gorostiaga e Irantzu Uriarte Gómez, ediles y cooperativista de Atalaya Ereaga, a las preguntas que EH Bildu y Elkarrekin Podemos les efectuaron el 18 de octubre pasado en la comisión extraordinaria de Territorio por razones de índole «privado y personal». A pesar de ello, la segunda vicealcaldesa ha considerado «inoportuna» la creación de la comisión al tiempo que se resuelve el expediente sancionador añadiendo que «habrá tiempo de depurar responsabilidades administrativas, penales y políticas».

Todos los grupos, a excepción del grupo proponente, han cuestionado la iniciativa, aunque para EH Bildu y Elkarrekin Podemos ello no ha sido óbice para votar a favor. Así, el independentista Ibon Rodríguez ha pedido al PP que «supere sus fobias personales y políticas» para articular una propuesta que obligue al PNV a dar más explicaciones a través de una propuesta de acuerdo que se lleve a comisión y posteriormente a pleno.

Xabier Benito, de Elkarrekin Podemos, ha acusado a los jeltzales de «saltarse el reglamento». «Nos quedan muchas dudas», ha dicho, algo en lo que han coincidido los otros corporativos de la oposición. Además, ha insistido en la razón por la que Inazio Uriarte Gorostiaga, en su condición de presidente de la comisión de Organización y Cuentas, no se abstuvo en una votación sobre un asunto en el que está implicado.

De nuevo, en varios pasajes del debate, se han denunciado los obstáculos articulados por el PNV para evitar dar explicaciones, a pesar de que la alcaldesa prometió tras la convocatoria de la comisión extraordinaria de Territorio que era «la primera interesada en aclarar lo sucedido», algo que han negado desde la oposición. Así, le han afeado a Agirre de que no compareciese y se limitase a responder de manera breve a las preguntas formuladas.

Rodríguez ha censurado el modo en que la jeltzale Janire Ocio gestionó la comisión extraordinaria pasada y cómo se dejaron de responder 27 preguntas, lo que le ha llevado a denunciar que no hay «voluntad» de aclarar nada. «Este asunto se está agrandando y dilatando en el tiempo porque la voluntad del PNV es absolutamente obstaculizadora», ha incidido.

Tras criticar el «oscurantismo», el corporativo soberanista de izquierdas se ha referido a la «crisis de gobierno limitada» que PNV y PSE no quieren reconocer pero que levanta aún más interrogantes, al haberse apartado de la Junta de Gobierno a una de las personas relacionadas con el caso.

Niegan la crisis de gobierno

A la jeltzale Keltse Eiguren, que ha ejercido en este punto del orden del día de portavoz de su grupo al haberse ausentado del salón de plenos Inazio Uriarte Gorostiaga al igual que su compañera Irantzu Uriarte Gómez, no le han gustado esas alusiones. Lo ha considerado «una falta de respeto» y ha defendido la «presunción de inocencia», al tiempo que ha sostenido que se ha tratado de una «reorganización» de la Junta de Gobierno ajena a esta polémica.

Más tarde, antes de la votación de la moción, la propia alcaldesa ha acusado a EH Bildu de usar esa cuestión de «manera torticera».

Respecto al proceder de su partido, Eiguren ha señalado que se respondió a todas las cuestiones que se preguntaron a los tres ediles y a la alcaldesa, al igual que se hizo en otros foros como la comisión de Organización y Cuentas.

Antes, ha manifestado que la constitución de la comisión de investigación que ha propuesto el PP no tiene «soporte legal», ya que las personas a las que se cite no tienen obligación de comparecer así como de aportar documentación a la misma.

Asimismo, la edil del PNV ha apuntado a que la denuncia de EH Bildu ante la Fiscalía, que ha derivado el caso a los juzgados de Getxo para que investigue por si se hubiera cometido ilícito penal, modifica el escenario anterior, en que todo pendía de resolver el expediente administrativo sancionador que se incoa en el Consistorio.