La joyería Fernando Monge conmemora 125 años de existencia con una edición limitada de relojes que saldrán a la venta por 325 euros. Según se explica en la nota enviada por VK Comunicación, se trata de una empresa familiar que se instaló en Bilbo en la segunda mitad del siglo XIX con la llegada a la ciudad de Juan F. Monge Otaduy, orfebre alavés.
El primer establecimiento de joyería de la familia se abrió en la calle Cintureria, en pleno Casco Viejo bilbaino. A Juan F. Monge, le sucedió su hijo Fernando F. Monge Abrisqueta que pondría el sello definitivo a la denominación del negocio y que sería el hombre que estableció relaciones con la Bolsa de Amberes e inició la importación de diamantes.
A le sucedió su hijo del mismo nombre Fernando F. Monge Arrieta, quien dio una nueva dimensión a la empresa familiar, poniendo en funcionamiento un nuevo comercio en la calle Ercilla en el año 1947, emplazamiento que conservan a día de hoy.
A Fernando le sucedió su hijo Manuel F. Monge G. Audicana, cuarta generación, quien continúa al frente de la dirección de la firma y que a conmemora este mes, 125 años de joyería en Bilbo.
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