
El juicio por la protesta que tuvo lugar en el Gobierno militar de Bilbo en noviembre pasado se ha resuelto sin penas de cárcel y multas mínimas, según ha informado el Grupo Antimilitarista de Bilbo (KEM-MOC). La petición de la Fiscalía era de 36 meses de prisión y 9.000 euros de multa.
El Juzgado de lo Penal número 5 de Bilbo no ha tenido en cuenta la petición fiscal y ha condenado a los dos acusados con multas de 720 euros (360 a cada uno de ellos) y rechazando la pena de cárcel.
La protesta que llevaron a cabo tuvo lugar en el Gobierno militar de Bilbo, situado en la calle Juan de Garay, en el barrio de Irala, y se enmarcaba en la campaña #Botakuartela para denunciar que «la guerra empieza aquí».
Según informa el Grupo Antimiltarista de Bilbo, reclaman que se desmantele el cuartel y destinar los 6.500 metros cuadrados que ocupa a mejorar las condiciones de vida de los vecinos de la capital vizcaina.
«La guerra es un crimen contra la humanidad y de nuevo, debido a la amenaza nuclear, es un riesgo para la vida en el planeta. El aumento del gasto militar previsto para 2023 nos coloca de nuevo en una carrera armamentística, que detrae recursos para la mejora de la vida de la mayoría de la población y aumenta los beneficios de esta industria», denuncian.
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