Agustin Goikoetxea
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad
Entrevista
Teresa Laespada
Candidata del PSE a diputada general de Bizkaia

«Es muy importante que hagamos una verdadera política de vivienda a través de la fiscalidad»

La diputada foral de Empleo, Inclusión Social e Igualdad saliente vuelve a ser la candidata del PSE a diputada general de Bizkaia. En su discurso, sin querer entrar en detalles, evidencia que no comparten prioridades con sus socios del PNV aunque en cuatro años no hayan expresado esas divergencias.

Teresa Laespada, candidata del PSE a diputada general de Bizkaia.
Teresa Laespada, candidata del PSE a diputada general de Bizkaia. (Oskar Matxin Edesa | FOKU)

Defiende que su partido ha dejado poso en el Gobierno foral aunque lo cierto es que el protagonismo ha sido del PNV, las carteras principales y el presupuesto ha estado en sus manos.

Cuando nos sentamos tanto en 2015 como en 2019 para pactar con el PNV, hicimos un proyecto de programa de gobierno. En él se recogió qué íbamos a hacer, dónde íbamos a estar, cuáles eran los proyectos que teníamos y dónde íbamos a incidir. Lo más importante tuvo que ver con la reforma fiscal. En 2013, hicimos una muy buena reforma fiscal, que vino marcada precisamente por la demanda que hizo el PSE al PNV. Luego, hemos ido haciendo pequeños ajustes. La gran apuesta del partido fue hablar sobre una reforma fiscal, que ha tenido un impacto directo. La pandemia la hemos pasado mucho mejor, precisamente, porque teníamos una muy buena reforma fiscal con la que hemos conseguido aumentar ingresos.

Dirigimos dos departamentos que tienen que ver con nuestra impronta y voto social. Nuestras políticas están encima de la mesa, las hemos llevado a cabo, hemos conseguido que en las áreas que gestionamos los socialistas hayan estado nuestras políticas y hemos ido marcando nuestra postura en las demás, porque cuando el PNV ha querido hacer algunas cosas, nosotros igual nos hemos negado. Lo que pasa es que no lo hemos estado aireando en los medios de comunicación, porque las discrepancias que surgen en un pacto de gobierno deben resolverse en el Consejo de Gobierno.

Ha hablado de fiscalidad, de los cambios que se introdujeron hace unos años, ¿hay algo que modificar en la actual modelo?

Sí, sin ninguna duda. Debiéramos empezar a darnos cuenta que hemos hecho progresividad en los ingresos y ahora hay que hacer progresividad quizás en el gasto fiscal, y eso significa que probablemente el quid de la cuestión de la redistribución de la riqueza tiene que ver con exenciones, deducciones, bonificaciones… Es ahí donde tenemos que mirar con cuidado qué estamos haciendo, quién se está desgravando, quién no, quién se está beneficiando y quién no. Tenemos mucho trabajo que hacer, que evaluar y que ver tanto en IRPF como en Sociedades.

Desde 2013 hasta aquí, sobre todo como consecuencia de la pandemia, el incremento de la inflación y la invasión de Rusia a Ucrania, se han ido adoptando medidas, de alguna manera parcheando el sistema. Toca en este momento evaluar todas esas medidas. Cuáles se van a quedar, cuáles van a ser temporales y ver qué resultados han tenido.

Y luego, claro que hace falta una reforma fiscal porque la sociedad va cambiando y vamos teniendo otras prioridades. Es muy importante que metamos en la ecuación vivienda y hagamos una verdadera política de vivienda a través de la fiscalidad. Si en el mensaje común de todos los partidos tenemos claro que hay que resolver la cuestión de la vivienda, que es un problema para la ciudadanía, que es un derecho, y además en Euskadi tenemos una ley, la Ley Vasca de Vivienda, que lo declara derecho subjetivo y ahora con la Ley española complementamos con todo eso, vamos a ver si somos capaces desde la fiscalidad, que es nuestro autogobierno, de introducir medidas fiscales para facilitar el alquiler.

¿Qué opina de que, según una encuesta de la propia Diputación, la ciudadanía considere el impulso de la actividad económica y el empleo el principal problema?

Creo que en Bizkaia se vive razonablemente bien, somos una sociedad rica. Eso no quiere decir que no haya una Bizkaia que la gente no quiere ver y yo sí veo, y es donde se forman las desigualdades.

Es verdad que el desarrollo económico y el empleo son prioridades para la ciudadanía. Recientemente se han publicado las cifras de afiliación a la Seguridad Social y del paro. Vamos viendo que cuando hemos hecho otras políticas de desarrollo económico, de protección a la ciudadanía, de estímulo, están funcionando. Tenemos la afiliación a la Seguridad Social, probablemente, la más alta de la historia. Medio millón de afiliados en Bizkaia, 997.000 en Euskadi. La cifra es buena, muy buena. Estamos en una senda buena de crecimiento, porque no solamente hay un crecimiento de las empresas, sino que también se refleja en el empleo.

¿Se puede hacer algo para reducir más esas bolsas de pobreza que siguen existiendo y que están localizadas en determinadas comarcas?

Es una de mis grandes preocupaciones. Siempre digo que Bizkaia está funcionando a dos velocidades. Hay que ponerse en serio a pensar que no podemos tener comarcas, como Lea Artibai o Uribealdea, donde van fenomenal en todas las tasas y otras que no, que son Margen Izquierda, Zona Minera, Encartaciones y Bilbao, determinadas zonas, no todo Bilbao, porque Bilbao, claro, es muy diverso, aunque tiene una concentración de pobreza importante. Tenemos 60.000 personas en paro registradas en Bizkaia. Tenemos que empezar a pensar y estamos trabajando cómo hacemos para acercarles al mundo laboral. ¿Qué tenemos que hacer? Es muy importante saber quiénes son las personas a las que podemos ir incorporando al mercado laboral y quiénes no van a poder incorporarse nunca o están extremadamente lejos. La Renta de Garantía de Ingresos y el Ingreso Mínimo Vital nos permiten seguir protegiendo a una población que está alejada del mercado laboral, porque tienen todos los derechos de dignidad posibles y establecer mecanismos para que no exista pobreza infantil, no exista desigualdad… Los procesos iniciales de la vida de las personas son muy importantes.

Se ha comprometido «a liderar una nueva política para recuperar nuestra industria». ¿Qué puede hacer la Diputación?

No tenemos probablemente la competencia, pero sí la incumbencia. Bizkaia no puede seguir perdiendo tejido industrial, no podemos pensar que aquí no pasa nada, la deslocalización de empresas es un hecho muy preocupante. ¿Qué tenemos que hacer? Primero, apostar por un tejido industrial que, sabemos, tiene que recuperarse. Diversificar ese tejido industrial, que tiene mucho que ver con energías renovables, que ya están entrando estas empresas en Euskadi y tenemos que permitirles que entren porque hay mucha política industrial europea que está apostando por la energía renovable y tendríamos que estar liderándolo ya. Acompañarles en los procesos que necesiten para estar en Europa, y eso significa que quizás desde la propia Diputación tendríamos que estar poniendo en marcha políticas de acompañamiento a pymes y micropymes, porque nuestra realidad es que el 85% de nuestro tejido son pymes y micropymes y no son capaces de competir a nivel internacional.

 

«Hay que crear un gran holding económico-financiero, donde quienes tienen capacidad para poder financiar y sostener empresas estén»

 

Hay que crear un gran holding económico-financiero, donde quienes tienen capacidad para poder financiar y sostener empresas estén. Kutxabank tiene fondos económicos y podría estar apostando por empresas. Hay que hacer que eso tenga su sentido, se engarce con el tejido industrial y luego empezar a abrir vías hacia la biomedicina, el desarrollo de maquinaría que tiene que ver con la salud, los semiconductores… Hay que mirar a Europa, a España y decir dónde se está poniendo el dinero, dónde está diciendo Europa que vamos, pues vayamos todos a por eso. No podemos quedarnos atrás esperando a ver qué pasa. Nuestra siderurgia ha sido y es un factor fundamental, no la vamos a perder, tenemos un tejido industrial tecnológico no demasiado fuerte que toca también fortalecerlo. Mi idea sería crear un holding, apoyar a pymes y micropymes para que puedan hacer y fortalecerse entre ellas, quizás una especie de consorcio para que fuesen mucho más fuertes. Bizkaia puede ayudarles y apoyarles en lo que sea necesario.

Hasta ahora las políticas han ido más orientadas a atraer capital de fuera. Usted lo que está planteando es que la inversión salga de aquí...

Claro, ¿es que no la hay? Aquí, hay riqueza. Igual tenemos que volver a tocar la puerta del BBVA... Igual tenemos que decirle a los grandes bancos que tienen que… Lo que estamos planteando es que pensemos cuáles son nuestras fortalezas y salgamos al exterior, no al revés.

En conflictos como el de las residencias, los sindicatos achacan a la Diputación que está ausente. ¿Cómo puede intervenir, porque el conflicto es eterno?

Las trabajadoras tienen todo el derecho del mundo a poner encima de la mesa todas sus reivindicaciones para con su patronal. Sin embargo, el Departamento de Acción Social, el PNV, ha tomado la decisión de elaborar un sistema de concertación de plazas públicas. Es la patronal la que tendrá que sentarse con la representación de las trabajadoras para resolver el conflicto. La Diputación tiene que abstraerse de alguna manera. Con el precio que se paga por cada una de las plazas públicas, creo que está suficientemente dotado para que la patronal asuma el coste salarial del incremento. Lo que hay que hacer es que se sienten en la mesa y negocien.

Llama la atención que, por ejemplo, el conflicto de Bizkaibus se haya resuelto relativamente rápido y el de las residencias no haya manera.

No le puedo contar los entresijos de las cosas…

 

«El subfluvial no hubiera sido mi prioridad. Mis apuestas históricas son la variante de Ermua y el derribo del viaducto de Rekalde»

 

¿Para usted es una prioridad infraestructuras como el túnel bajo la Ría?

No estrictamente. Si estamos hablando continuamente de transporte público, que la gente deje su coche privado en casa, es verdad que hemos hecho un desarrollo urbanístico hacia Uribe Kosta que genera en La Avanzada y en los accesos a Bilbao y a los parques tecnológicos atascos. La apuesta tiene que ser por el transporte público, porque en este preciso momento estamos hablando de lo que significa la contaminación y el uso de transporte privado. No nos hemos enfrentado con esta cuestión porque es verdad que si avanza la electrificación del transporte privado y resulta que la contaminación baja, igual resulta que el subfluvial puede ser necesario. En este momento, si me pregunta cuál hubiese sido estratégicamente mi apuesta, el subfluvial no hubiera sido mi prioridad. Mis apuestas históricas son la variante de Ermua y el derribo del viaducto de Rekalde y ahí sí hemos tenido un pequeño conflicto.

¿Qué posición mantienen respecto al proyecto del Guggenheim en Urdaibai?

Estoy esperando a ver el proyecto. De momento, he oído lo mismo que los medios de comunicación, no tengo más información. En principio, estoy con todas las reservas porque no nos convence pero es verdad que la ministra Teresa Rivera tiene que tener más datos que nosotros seguramente y ella ha ido haciendo una apuesta por la recuperación de los terrenos. Murueta está en la línea de costa. Es una concesión que hizo el año 1943 el Gobierno de España a Astilleros Murueta. Son terrenos del Estado. Estoy esperando a ver cómo se posiciona el Ministerio. Estoy segura de que para hacer la apuesta económica que han hecho, tienen datos que yo desconozco y prefiero reservarme. Mi apuesta personal es primero la Reserva, esperar, conocer el proyecto y luego opinar.