La reapertura de los cines en plena temporada veraniega va a poner a prueba el verdadero potencial de la industria de Hollywood, con su decidida apuesta por producciones pensadas para el público familiar. “Scoob!” (2020) es un título propicio para comprobar la respuesta del gran público ante el espectáculo asociado al consumo de palomitas, así como para calibrar dentro de una situación social tan cambiante la rentabilidad de las fórmulas de continuidad. No en vano, estamos ante el típico relanzamiento, tanto en cuanto Warner considera que el catálogo de la mítica productora de animación Hanna-Barbera sigue constituyendo uno de sus mayores activos, convencidos de que personajes como Scooby-Doo todavía conservan un gran tirón.

La nueva aventura del famoso perro gran danés, que podremos ver en nuestras salas a partir del 16 de julio con el título de “¡Scooby!”, quiere ser una versión actualizada de esta franquicia con un target que incluye a niños y niñas entre los 10 y los 13 años de edad. El lenguaje que utiliza a tal fin es el de las nuevas generaciones millenial, con constantes referencias a las tecnologías telemáticas y a los iconos de la cultura pop de uso actual en las redes. El cambio de tendencia ha molestado al colectivo de fans amantes de la vieja serie televisiva, ya que el contenido principal del misterio ha sido reemplazado por otro que pertenece de lleno a la moda imperante de las películas de superhéroes.

No obstante, resulta innegable que la galería de personajes animados de Hanna-Barbera está repleta de superhéroes infantiles, y así en los títulos de crédito finales de “Scoob!” una de las figuras invitadas es La Hormiga Atómica. Por otra parte, el cartoon siempre ha contado con villanos, motivo por el que como pareja villana han rescatado para la ocasión a las estrellas de “Autos locos” Pierre Nodoyuna y el perro Patán. Para hacerles frente, han resucitado de la serie original a Halcón Azul y su nave La Furia del Halcón, junto con la copiloto afroamericana Dee Dee Sykes y el perro robot Dinamita. Se supone que este Halcón Azul es hijo del anterior, para que todo se renueve conforme a guion.

La superheroica aventura ha sido escrita por el actor Matt Lieberman, muy conocido por su trabajo delante y detrás de la cámara en la serie de acción real “Nuclear Family” (2016). La realización ha sido encomendada a Tony Cervone, un hombre de la casa especialista en reactivar viejas franquicias al gusto del nuevo milenio, incluyendo por supuesto a “Scooby-Doo”, además de “Tom y Jerry”, “The Looney Tunes Show” o “Los Picapiedra y WWE”.

El reparto actoral de doblaje en su versión original está compuesto por voces reconocibles, destacando el fichaje de Mark Wahlberg (Halcón Azul), acompañado de Will Forte (Shaggy Rogers), Zac Efron (Fred Jones), Amanda Seyfried (Daphne Blake), Jason Isaacs (Pierre Nodoyuna), Billy West (Patán), Tracy Morgan (Capitán Cavernícola), Kiersey Clemons (Dee Dee Sykes), Ken Jeong (Dinamita), Gina Rodriguez (Velma Dinkley) y Frank Welker (Scooby-Doo).

La acción y los gags cómicos no cesan a lo largo de una odisea épica embromada, cuyo desarrollo va destinado a diseñar el futuro de Mystery Inc., la compañía de investigación fundada por Shaggy Rogers, Daphne Blake, Fred Jones y Velma Dinkley. Esto no quiere decir que se eliminen elementos imprescindibles como la furgoneta hippy o surfera The Mystery Machine, tan inherente a este cuarteto visto siempre como una cuadrilla muy unida.

Pero como se trata de un relanzamiento, no falta el recurso de volver sobre los orígenes del héroe canino de la función y el grupo de colegas humanos adolescentes. Por eso en la introducción de la película Scooby-Doo aparece como un pequeño cachorro, que sigue a Shaggy, Daphne, Fred y Velma en su primer caso iniciático, consistente en introducirse en una casa embrujada la noche de Halloween en que empezaron sus peripecias.