GARA
GERNIKA

Descendientes de los bombardeados en Gernika defienden el derecho al asilo

Descendientes de quienes sufrieron el bombardeo de Gernika hace 79 años se manifestaron ayer en su localidad para expresar su bienvenida a las personas refugiadas y defender el derecho de asilo. «Quedan cientos de Guernicas en el mundo», recordaron.

En una jornada en la que volvieron a llegar noticias de decenas de personas muertas en bombardeos sobre la ciudad siria de Alepo, que dejan al borde del colapso la propia atención sanitaria, Gernika se movilizó ayer a última hora de la tarde «en contra de la guerra» y «a favor del derecho de asilo», a iniciativa del colectivo Lobak, nuevas generaciones entre las que hay nietos y nietas de quienes sufrieron las bombas aquel 26 de abril de 1937.

«Queremos construir un nuevo futuro sin olvidarnos del pasado y tender la mano a todo aquel que necesite ayuda», explicaron los impulsores de la movilización, poniendo de relieve el paralelismo que existe entre quienes huyen del horror de la guerra, ya sea hace 79 años o en la actualidad.

Los convocantes de la marcha, que partió del mismo lugar en el que se encontraba el refugio antiaéreo de la calle Andra Mari y concluyó en el búnker de Astra, destacaron ya en su convocatoria que saben «muy bien que el hambre, el frío, las deportaciones, el exilio, la represión... son parte de la guerra y hay que aprender de los errores». «Emprendamos el camino hacia el cambio entre todos y difundamos nuestro mensaje a los cuatro vientos», manifestaron.

«La obligación de recordarlo»

Las nuevas generaciones de gernikarras manifestaron que siguen teniendo muy presente qué ocurrió en 1937 aun no habiéndolo vivido en primera persona. «Para nosotros cada día que pasa es 26 de abril y siempre tendremos la obligación de recordarlo», indicaron desde la plataforma Lobak, que invitó a «que no reine el silencio», sino que prevalezca el mensaje contra las guerras y para que «los muros caigan de una vez».