Óscar de Marcos inició su enésima carrera y sintió que su pubis había dicho basta. Al segundo, el balón regresaba a los dominios de la zaga rojiblanca y el alavés regalaba un último esfuerzo antes de que la pelota saliera de banda y el jugador se dejara caer sobre el césped del estadio grancanario para reclamar el cambio. Ernesto Valverde confirmaba después que las dolencias del futbolista habían llegado a su límite y ayer el club rojiblanco informaba del próximo viaje de defensor a Alemania para confirmar su paso por quirófano.

El de Guardia es uno de los leones que más minutos acumula esta campaña. Nada que menos que 4.434 entre todas las competiciones este curso, siendo el jugador de campo más utilizado por Ernesto Valverde. El lateral venía arrastrando problemas, se quedó ya fuera de la convocatoria ante el Levante, regresó ante el Celta sobre todo porque la necesidad obligaba a contar con todo el potencial posible en el equipo y cuando parecía apuntar a que tampoco viajaría a Las Palmas, no solo entró en la lista sino que fue titular tocándole encima bailar con el más incisivo de los canarios, Jonathan Viera. Al final, resultó que su pubis «no podía más», resumió el técnico rojiblanco.

El defensor rojiblanco viajará a Alemania para pasar consulta con la ya conocida doctora Ulrike Muschaweck en Munich. Será el próximo día 23 y, según el club, «en el caso de que se confirme por su parte el diagnóstico de “sports hernia” bilateral como causa de su pubalgia será intervenido el día 24». Todo indica que De Marcos pasará por el quirófano, a partir de lo cual la recuperación viene a ser de unos dos meses, es decir, que estaría para mediados o finales de julio, listo para incorporarse a la pretemporada si es que el Athletic no tiene que jugar las previas de Europa League.

Cuenta atrás para Gurpegi

La doctora Muschaweck ha intervenido en las últimas décadas a un buen número de futbolistas del Athletic, entre ellos, Jon Pérez ‘Bolo‘, José Mari, ‘Tiko’, Joseba Etxeberria, Fran Yeste, Mari Lacruz, Carlos Merino, Ibon Gutiérrez, Amorebieta, Ander Herrera o Aduriz, y hasta el propio Carlos Gurpegi, el otro gran protagonista de la semana.

El navarro deshoja los días del calendario para su inminente adiós, del que de momento sigue sin trascender nada ni sobre cuándo hablará ante los medios de comunicación, ni qué preparan tanto club como la grada popular Iñigo Cabacas. Ayer saltó a la palestra el nombre del alemán Jupp Heynckes –que cumplió 71 años–, el técnico que dio la alternativa al de Andosilla, como una de las posibles sorpresas en la despedida del capitán. Dicho lo cual, ni nos imaginamos lo que sería San Mamés si apareciera por allí el rosarino Marcelo Bielsa, otro de los técnicos que más ha influido en la carrera del navarro, junto al actual Ernesto Valverde.

Sea lo que sea lo que reserve ese día a Gurpegi, el defensor y sus compañeros no pueden descentrarse mucho de lo que está todavía en juego este sábado (19.30, arbitrará Álvarez Izquierdo) ante el Sevilla, un equipo al que se refirió ayer Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional, sobre su petición de haber jugado el viernes en lugar del sábado, por aquello de la final europea ante el Liverpool la semana que viene. «Visto lo de ayer, cuando no sacó a todos sus titulares, el Sevilla ya ha empezado a descansar desde la semana pasada. Si sigue con la misma línea no creo que sea mucho problema», se soltó.

El Sevilla no ha ganado lejos del Pizjuán y ayer, su director deportivo Monchi era muy crítico, pero tampoco encontraba explicación. «Estamos insatisfechos con lo hecho en Liga, sin perder el Norte. No es para estar contentos. No es a lo que aspirábamos», se lamentaba.