El Ayuntamiento de Trebiñu ratificó ayer el acuerdo del pasado 8 de marzo, cuando el Pleno apostó por relanzar el proceso de integración en Araba mediante una proposición de ley remitida al Congreso de los Diputados por el Parlamento de Gasteiz. Una &bs;vía que ya fue empleada sin éxito por los municipios del enclave en el año 2014.

Según informó la agencia Efe, todos los ediles, salvó los del PP, sumaron sus votos para dar una respuesta contundente a la delegada del Gobierno español en Castilla y León, María José Salgueiro, que exigió la anulación del acuerdo por considerar que este es «inconstitucional». El alcalde de Trebiñu, Ernesto Argote, rechazó la postura de la delegada, y afirmó que el Ayuntamiento no incurre en ninguna ilegalidad por querer que el Congreso se pronuncie sobre el futuro del enclave.

Los asistentes a la sesión plenaria también aprobaron remitir a la Delegación del Gobierno español la información solicitada sobre los convenios firmados con Araba. En este sentido, conviene recordar que en el año 2001 la Diputación firmó con Trebiñu y Argantzun un acuerdo marco para la prestación de servicios de sanidad, educación y transporte. «No tenemos intención de ocultar nada», destacó Argote, que insistió en la necesidad de firmar un «convenio global transitorio».

Acuerdo «ilícito»

Por su parte, el presidente de la Diputación de Burgos afirmó que el acuerdo ratificado por el Consistorio de Trebiñu es «ilícito» y será recurrido por el Gobierno español y por la Junta de Castilla y León. «Más advertencias no se les pueden dar», señaló César Rico, que mostró su disposición a implementar nuevos servicios, respetando las competencias de cada institución.