Estados Unidos y Rusia acordaron ayer prorrogar otras 48 horas el alto el fuego en Siria que entró en vigor el pasado lunes y que, según ambas potencias, se ha respetado ampliamente pese a incidentes aislados. El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, y su homólogo ruso, Sergei Lavrov, hablaron por teléfono para valorar los primeros dos días de tregua «y han acordado prolongar el cese de las hostilidades 48 horas más», con el objetivo de que dure siete días , indicó el portavoz estadounidense Mark Toner.

«Ha habido un acuerdo general en que, a pesar de la violencia esporádica, se está manteniendo. La violencia es significativamente baja», indicó Toner. El general Viktor Poznikhir, miembro del Estado mayor ruso, denunció que los grupos rebeldes sirios han violado el alto el fuego en 60 ocasiones. «Hemos visto violaciones de ambas partes», aseguró Toner.

Según el jefe del Centro ruso de coordinación en Siria, el general Vladimir Savchenko, uno de los objetivos bombardeados por los insurgentes fue la ruta de Castello, eje vital para llevar la ayuda humanitaria a Alepo y que ha sido ocupado por militares rusos, en un intento de tutelar esta distribución. Savchenko indicó que el ataque a la carretera amenaza la retirada de las tropas sirias de la ruta. El cese el fuego pactado por EEUU y Rusia ha permitido una considerable reducción de los ataques pero uno de sus objetivos, el envío de ayuda humanitaria a las ciudades asediadas no se ha cumplido. La ayuda sigue bloqueada ante la falta de garantías de seguridad para los convoyes, según el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien pidió a Washington y Moscú que colaboren para desbloquear estos envíos. Ban Ki-moon indicó que la ONU tenía ayer todo previsto para enviar veinte camiones a Alepo con ayuda para 20.000 personas en la frontera turca. «Es absolutamente necesario que se cumplan los compromisos de seguridad» para que los camiones puedan avanzar, insistió el secretario general de la ONU, que quiere que Moscú haga cumplir estos compromisos al Gobierno Sirio y EEUU a la oposición armada.