Los mercados de renta variable caminan con buen paso, apoyados en la marcha alcista de Nueva York, las expectativas de una subida cercana de los tipos de interés en Estados Unidos y un cuadro macroeconómico moderadamente positivo en Europa. Ayer, el Ibex marcaba máximos desde diciembre de 2015 al alcanzar los 9.584,10 puntos, después de subir un 0,78%. En lo que va de año gana un 2,48%. París se anotó un 0,59%; Fráncfort, un 0,19%; y Londres, que se encuentra a las puertas de un nuevo máximo histórico, un 0,47%.

El empujón al alza de las medidas anunciadas por Trump sigue vigente en Nueva York, donde los principales índices logran nuevos techos históricos día tras día. Ese optimismo, sin embargo, deberá refrendarse ante un escenario de encarecimiento del precio del dinero, que deberá respaldar la positiva marcha de la economía, especialmente en inflación y empleo. Y el primer movimiento parece muy próximo, después del reciente aviso de Janet Yellen sobre el peligro de esperar demasiado y la subida hasta el 0,6% de la inflación en enero, que en tasa interanual es del 2,2%. En Europa, las expectativas dibujadas por la CE para el crecimiento, así como la desaparición del riesgo de deflación, dan margen también al optimismo. Sin embargo, están presentes también la amenaza de los efectos del Brexit, las medidas proteccionistas de Trump y la situación de Italia y Grecia.

Dentro del Ibex, los mejores fueron BBVA (+3,15%), Santander (+1,72%) y ArcelorMittal (-1,69%), mientras que Dia (-1,48%) registró la mayor caída. Telefónica (+1,20%) e Iberdrola (+0,53%) también aportaron puntos. En París, brilló Crédit Agricole (+4,76%), aupado por sus buenos resultados. Renault (-1,47%) y Peugeot (-0,86%) sufrieron recogida de beneficios.