Tras el accidente del sábado de Izagirre y Valverde, que algunos achacan al aceite que había en la calzada tras la caída previa de una moto policial en la misma curva, ayer fueron diez los corredores que se fueron al suelo en el kilómetro 170, a 33 de meta, si bien ninguno de ellos sufrió lesiones graves.

Sin embargo, cundió el pánimo algunos instantes al confirmar que Froome (Sky) y Bardet (Ag2r) estaban entre los implicados por lo que para el devenir del Tour podía suponer la baja de dos favoritos. El peor parado fue el galés Luke Rowe, compañero de Froome, que sufrió un golpe en la cabeza y terminó pendiente de una radiografía que descarte daños internos.

Pero son duros estos ciclistas. «Afortunadamente no tengo ninguna lesión, solo he perdido un poco de piel, pero esto forma parte de la naturaleza de la carrera. Sabíamos que las condiciones eran complicadas, que la carretera estaba mojada y eso supone un gran riesgo, es fácil que haya contacto entre las ruedas», fue la valoración de Froome. En tanto que Bardet dijo que iba «a pasar una mala noche, pero no tengo nada grave. No es una buena noticia, pero son gajes del oficio. Hubiera podido ser peor. Tengo los dolores normales de una caída a 50 por hora. Pero el Tour no ha hecho más que empezar. La moral está bien», añadió animado.

Contador, agradecido a los suyos

Uno de los que suele ser habitual en las caídas en los últimos años es Alberto Contador y ayer, tras llegar a meta sin un rasguño y haber visto las orejas al lobo, reconoció que estaba «contentísimo con el equipo. Me ha arropado de forma impresionante toda la jornada».

«Estos días puedes perder el Tour. Lo más importante es intentar salvarlos. Cada día que cruzas la meta sin percances es un éxito. A mi me gusta la lluvia, pero en la primera semana con todos los nervios que hay es todavía peor», comentó tras apuntar que se libró de la caída por estar situado en un lateral.

 

Diez corredores implicados en la caída del día

Según confirmaron los comisarios de carrera los diez corredores afectados por la caída fueron Froome, Bardet, Rowe, Delage, Domont, Küng, Claeys, Grivko, Knees y Leezer, que entró último a un cuarto de hora.

 

Polémica por el tejido Vortex que utiliza el Sky

Los equipos BMC y FJD protestaron porque varios corredores del equipo Sky utilizaron el tejido denonimado Vortex en la contrarreloj, una especie de parches que se llevan en brazos y hombros y mejoran la aerodinámica.