El pudo volver a cerrar por encima de los 10.700 puntos, en su nivel más alto de cinco semanas. Desde el 28 de junio no los había superado. Ahora las apuestas de los analistas e inversores se centran en las posibilidades que tiene para consolidar esta posición antes de tomar el camino hacia los 11.000 puntos.

No fue, sin embargo, una jornada con señales de fortaleza, ya que predominó la atonía propia del verano, con escaso volumen –el menor en catorce meses– y variaciones leves en los índices. Tampoco se conocieron informaciones susceptibles de influir en el mercado de forma decisiva. La subida de los índices de Wall Street ya casi pasa desapercibida, aunque una vuelta atrás desde los máximos históricos ininterrumpidos del Dow Jones sí podría tener consecuencias. Además, sigue un goteo de datos sobre la economía alemana que desdibuja el panorama tan positivo abierto hace meses. Sus exportaciones cayeron en junio un 2,8% respecto al mes anterior. No se había visto un retroceso tan fuerte desde agosto de 2015.

El Ibex terminó por encima de los 10.700 puntos tras superar un pinchazo al mediodía y anotarse un 0,55%. Hoy saldrá desde los 10.734,70. En la bolsas europeas también se cerró con leves ganancias. Fráncfort avanzó un 0,28%; París, un 0,21%; y Londres, un 0,14%.

Los mejores valores de la sesión eran Enagás (+1,72%) y Acerinox (+1,54%). En el lado de los perdedores, Colonial (-0,85%), Bankia (-0,66%) y Técnicas Reunidas (-0,66%) registraron las mayores caídas. Entre los pesos pesados, todos al alza, los más entonados fueron Telefónica (+1,23%) e Inditex (+1,18%). Dentro del Cac, despuntó Crédit Agricole (+2,79%) al sumar cuatro días en verde después de presentar sus resultados.