Jaione Ekisoain fue eliminada ayer del Campeonato del Mundo de Judo que se está celebrando en Budapest tras caer en la segunda jornada.

La judoca navarra, en categoría de -57 kilos, superó en primera ronda a la azerbaiyana Ichinkhorloo Munkhtsedev por penalizaciones en el punto de oro. Pero la competición se complicó para Ekisoain cuando en su camino se cruzó una de las grandes favoritas, la número 3 del ranking mundial, la francesa Helene Receveaux, que llegó a segunda ronda tras quedar exenta en la primera. La vasca perdió el combate por Ippon cuando tan solo transcurría un minuto del mismo.

Receveux se enfrentó luego en semifinales a la número dos del mundo, Tsukasa Yoshida, con la que salió derrotada por lo que se tuvo que conformar con el bronce, que tuvo que compartir con la británica Nekoda Smythe-Davis. Por su parte Yoshida se colgó la plata al caer en la final ante la mongola Sumiya Dorjsuren, que solo necesitó 13 minutos de combate para ganar el oro.

A sus 26 años, Dorjsuren llegó a la cota más alta de su carrera tras ser medalla de bronce en el Mundial de 2015 y plata en los Juegos de Río 2016.

En categoría masculina, el martes fue Gar Uriarte –hermano del olímpico Sugoi y que había quedado exento en la primera ronda– quien se quedó sin opciones de seguir en la competición de -66 kilos tras ceder ante el coreano Baul An, número 2 del ranking y subcampeón en Río.

También en el cuadro masculino se disputó ayer la final de -73 kilos en la que se impuso el japonés Soichi Hashimoto sobre el azerbayano Rustam Orujov. La medalla de bronce fue compartida entre el coreano An Changrim y el mongol Odbayar Ganbaatar.