Martxelo DIAZ-Nerea GOTI
DÍA INTERNACIONAL CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA

TAMBORES DE LUCHA CONTRA TODAS LAS VIOLENCIAS DEL SISTEMA

EL MOVIMIENTO FEMINISTA ALZÓ AYER LA VOZ CONTRA LAS EXPRESIONES MÁS EVIDENTES DE LA VIOLENCIA, PERO TAMBIÉN CONTRA TODO UN SISTEMA CIMENTADO EN FORMAS NATURALIZADAS DE AGREDIR A LAS MUJERES, EN EL QUE LA JUSTICIA NO ESTÁ CON LA VÍCTIMA. FRENTE A ELLO, ABOGARON POR LA RESPUESTA EN RED Y LA AUTODEFENSA FEMINISTA.

Las movilizaciones por el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres atravesaron ayer capitales y pueblos con un mensaje unitario de tolerancia cero tomando como referencia las expresiones más reconocibles del maltrato y con una cifra de fondo, siete mujeres muertas por violencia machista en lo que va de a&bs;ño en Euskal Herria. Donde el movimiento feminista alzó la voz lo hizo con un rotundo mensaje que reclama ir más allá de los minutos de silencio y que sitúa enfrente no solo situaciones puntuales sino todo un sistema de vida que se asienta sobre un mosaico de violencias naturalizadas, estructurales y culturales continuas contra la mitad de la sociedad.

En las capitales de Hego Euskal Herria, las marchas, importantes en número y diversas en cuento al perfil de las personas participantes, centraron sus lemas en la «injusticia patriarcal» y en la necesidad de responder en red y mediante la autodefensa feminista, como también expresó una concentración ante el Ayuntamiento de Baiona.

“(In)justizia patriarkalaren gainetik, saretze feminista” fue el lema de la manifestación en Bilbo, que reunió a cerca de diez mil personas, según el recuento de GARA. El sonido de los tambores acompañó buena parte del recorrido de una marcha en la que las participantes corearon con intensidad multitud de consignas como «Justicia patriarcal, violencia institucional», «Jueces españoles amparan violadores», «No es crimen pasional, es asesinato» o «No es un caso aislado se llama patriarcado», entre otros. Muchas de las participantes acudieron a la marcha con carteles propios con lemas como «No nos gusta esta simulación de Matrix».

El mensaje final de la marcha remarcó que «el sistema patriarcal, capitalista y colonialista, necesita diferentes formas de violencia para sobrevivir» y remarcó que muchas de ellas están relacionadas con «género, raza, etnia, clase social,orientación sexual, religión, edad, nacionalidad, nivel de estudios, diversidad funcional y otras razones». Denunció, asimismo, la situación de desprotección de las mujeres refugiadas y reclamó la abolición de la ley de extranjería, así como la desprotección de menores que sufren violencia patriarcal.

«Game over» en Iruñea

“Game over. Indarkeria sexistari kitto” fue el lema que encabezó la marcha en Iruñea, marcada por gritos contra la justicia heteropatriarcal y en favor del programa Skolae impulsado por el Gobierno de Nafarroa y atacado por la derecha política y mediática.

La marcha arrancó del kiosco de la Plaza del Castillo para concluir en el mismo punto con un mensaje en el que se recordó a las siete mujeres muertas como consecuencia de la violencia machista. El movimiento feminista denunció desde allí que la justicia patriarcal y jueces machistas ponen en duda sistemáticamente las denuncias de las mujeres, mientras el capitalismo ampara la discriminación, la publicidad las convierte en objeto y las religiones intentan dirigir sus vidas.

En la capital alavesa, el sistema judicial también estuvo en el centro de la denuncia, con gritos como «Epaile matxista, epaile terrorista», «Jueces y fiscales también son culpables» y un llamamiento a que la justicia «se ponga del lado de las mujeres». Al tiempo, una manifestación recorrió la Parte Vieja donostiarra en un jornada marcada por el cierre de varias avenidas por la celebración de la maratón.

La animada marcha, a ritmo de batucada, exhibió carteles en los que podían leerse lemas como «Lo contrario al feminismo es la ignorancia» o «Si no hay sí es no».

 

Milaka lagun kalean, indarkeriaren aurka

Indarkeria matxistaren aurkako mobilizazioek milaka lagun bildu zituzten atzo euskal hiriburuetan. Bi lelo nagusirekin: emakumeekiko indarkeria era ugaritan baliatzen duen sistema patriarkala salatzen zuen batak, eta «indarkeriarik gabeko bizitza bizitzeko emakumeok dugun eskubidea erdigunean» ipiniko duen justizia eskatzen zuen besteak. Instituzioen erantzukizuna ere nabarmendu zuten, minutuko isiluneak egitea ez dela aski esanda. Baliabideak eta neurriak eskatu zituzten, ekonomikoak eta profesionalak, prebentzioa indartu eta indarkeria jasaten duten emakumeei behar bezalako arreta eman ahal izateko.