El proyecto Kostegoki, que tiene como objetivo analizar el riesgo y planificar la adaptación de las áreas costeras de la CAV más expuestas a los efectos del cambio climático, señala Donostia, el estuario del Nerbioi, Bermeo y Zarautz, entre las zonas más vulnerables. Los expertos destacan la capital donostiarra y el Nerbioi, ante la subida del nivel del mar; el caso de Bermeo, «por el riesgo de daños a la zona portuaria, entre otros fenómenos, debido al ascenso del nivel medio del mar y a las mareas», y Zarautz, por el «riesgo de inundación debido al oleaje».

La viceconsejera de Medio Ambiente del Gobierno de Lakua, Elena Moreno, ofreció ayer estos datos y destacó el riesgo que supone que «un 55% de la población se concentre en dos comarcas costeras, que suman menos del 10% del territorio: Gran Bilbao y Donostialdea».

El director de Investigación del Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria, Iñigo Losada, explicó que en la costa vasca se dan dos elementos fundamentales: «La mayor parte de las playas son encajadas, lo que hace que la capacidad de adaptación sea limitada» y que «hay muchísima actividad socioeconómica muy cerca de la costa».

Losada, referente en la evaluación del cambio climático entre la comunidad científica, señaló que en la CAV «hay cierto margen de actuación, aunque estamos muy expuestos».