Gloria Rekarte
Expresa
AZKEN PUNTUA

Agur de Pamplona

En la noche electoral las primeras reacciones, las primeras declaraciones, son siempre interesantes. La decepción vuelve a los políticos más cautos, más medidos y comedidos, pero al calor de la euforia, nos ofrecen testimonios maravillosos. Porque poco puede haber más clarificador que el alborozado «Nos alegra mucho poder decir: agur Asiron, agur, agur de Pamplona, agur!», con el que Maite Esporrin se expresaba antes de pasar a felicitar calurosamente a la derecha por sus buenos resultados. No creo que fuera su intención dejarlas tan claras, pero las inclinaciones naturales del PSN resultan más que evidentes.

Si atendemos a tal declaración de principios, a las simpatías hacia los resultados de la derecha, y hasta al «agur de Pamplona», pese a ser una bonita manera de meterle, en media frase, una patada al euskera y otra al castellano, no se puede decir que quede mucho en el aire. Bien es cierto que el PSN no deja de ser un partido con sede en Ferraz y oficinas en Paseo de Sarasate y harán lo que digan allá y no lo que decidan aquí. Que tampoco es la mayor de las garantías. Pero aquí estará EH Bildu.

Ha sido una pena no poder mantener lo que acababa de echar a andar, pero sabemos que hay una fuerza capaz de enfrentar a la derecha, por muchas siglas que sumen y por muchos agures que le deseen. Estará. Imparable.