Beñat ZALDUA
ESCENARIOS TRAS EL 26M

Los votantes navarros premian la gestión de EH Bildu en los consistorios

Son muchos los prismas para mirar los resultados del 26M. Uno que quizá ha pasado desapercibido es el que analiza el desempeño de los partidos en los municipios en los que han gobernado. Un repaso a los datos de Nafarroa muestra que, pese a la fuerte reaparición de la derecha, los votantes han premiado la gestión de los alcaldes del cambio.

Si la democracia fuera un juego, las elecciones serían poco más que el momento en el que se reparten las cartas. Cuanto mejor hagas tu trabajo, mejor mano tendrás, pero tener las mejores bazas no te asegura la victoria. Javier Esparza tiene 20 triunfos en el Parlamento navarro, pero si el PSN juega bien sus 11 –está por ver–, será María Chivite quien tome el relevo de Uxue Barkos. Más que de resultados electorales, en sistemas pluripartidistas con mayorías absolutas prácticamente imposibles, quizá convendría hablar de puntos de partida electorales.

Antes de jugar la partida del 15 de junio –elección de alcaldes y alcaldesas– y antes también de levantar actas sobre victorias y derrotas electorales, conviene mirar desde todos los ángulos los números del 26M. Aquí vamos a intentar hacerlo en función del premio o el desgaste a la gestión municipal, lo cual requiere un inciso en Nafarroa, donde decenas de consistorios son gobernados por agrupaciones locales sin relación orgánica con partidos. En este trabajo solo se han tenido en cuenta las candidaturas municipales en las que los partidos se han presentado con sus propias siglas. No están reflejados, por tanto, todos los municipios navarros, pero sí los más significativos.

La primera conclusión es que la gestión de ayuntamientos no ha lastrado, en general, los intereses de ningún partido. Más bien al contrario, dado que todas las formaciones han crecido allí donde gobernaban, desde Navarra Suma (en 2015 UPN y PP) hasta Izquierda-Ezkerra.

Pero no todos los crecimientos son iguales, ni mucho menos. En el caso de NA+, pese al importante aumento de votos globales, apenas crece 260 votos en los municipios que logró retener en 2015. El grueso de su crecimiento (19.824 votos) se concentra en ayuntamientos en los que estaba en la oposición.

Un fenómeno bien diferente se da en el caso del PSN, donde sí se refleja un importante crecimiento en los 17 ayuntamientos que ha gobernado. Sin restar ningún mérito a resultados como los de San Adrián, donde el alcalde Emilio Cigudosa ha pasado de una mayoría absoluta del 51,82% a una absolutísima del 74,18%, no parece descabellado ligar gran parte del aumento al crecimiento generalizado del PSN en toda Nafarroa. De hecho, la subida de los de Chivite es aun mayor en los municipios en los que estaba en la oposición.

Premio al cuatripartito

Las tres formaciones del cuatripartito con responsabilidades de gobierno municipal también han crecido, en términos generales, allí donde gobernaban. Paradigmático es el caso de Izquierda-Ezkerra, que ha bajado –o no se ha presentado– en los municipios en los que estaba en la oposición, pero ha dado un salto para arriba allí donde gobernaba, es decir, en Tutera. El hasta ahora alcalde Eneko Larrarte consiguió 1.061 votos más que en 2015, aunque NA+ recuperó la mayoría absoluta.

El caso de Geroa Bai es parecido, ya que baja donde no gobierna, pero crece –con excepciones–, donde sí lo hace. Pierde algunos votos en Eguesibar y Lesaka, pero el cómputo total es positivo gracias a Altsasu, donde personas que en las forales han votado a Navarra Suma o PSN, parecen haberse decantado por Geroa Bai en las locales.

El caso más significativo, en cualquier caso, es el de EH Bildu, que registra el fenómeno inverso al de NA+. Allí donde no gobierna apenas crece un 2,27% (291 votos), pero donde ha ejercido la alcaldía, su crecimiento se dispara a un 29,99%. Son 12.548 votos más que hace cuatro años, lo que eleva a la coalición independentista a unos inéditos 67.515 votos en las municipales de Nafarroa. Aún a riesgo de marear con las cifras, no hay que dejar de destacar que son 17.000 votos más que los obtenidos por EH Bildu en las elecciones al Parlamento.

Aunque hay excepciones como las de Tafalla, explicadas por dinámicas locales, o Agoitz –donde el descenso en votos se debe a que EH Bildu era la única fuerza en liza– el crecimiento es generalizado, desde Sartaguda y Lizarra hasta Baztan, pasando por Iruñerria, donde destacan municipios como Barañain, Antsoain, Uharte o Berriozar. Pero es la capital navarra la que destaca sobre cualquier otro municipio, pues Joseba Asiron se ha enfilado hasta los 26.691 votos en Iruñea, un 56,97% más que cuatro años atrás. Puede que no sirva para gobernar ahora, pero ya saben, en cuatro años se vuelven a repartir las cartas.

 

Con excepciones locales, el fenómeno se repite en la CAV

El fenómeno no se circunscribe a Nafarroa. En términos generales, allí donde ha gobernado, a EH Bildu le ha ido bien. Así lo muestran unas cifras que corrigen parcialmente algunas de las lecturas que sobre la gestión institucional se hicieron tras la bajada de 2015. Esto no quiere decir, probablemente, que la gestión no desgaste, o que no tenga el peligro de hacerlo, pero es la prueba de que se puede salir fortalecido de la gestión municipal.

Más allá de los principales municipios navarros, que ya hemos repasado en el texto principal, también en la CAV nos encontramos con casos claros de premio al gobierno, lo cual no quita para que haya ejemplos contrarios, como los de Bermeo o Laudio. Las municipales siempre son elecciones complejas en las que los vectores generales se cruzan con factores locales, en una mezcla que tiene sus propios ingredientes en cada lugar.

Con todo, predominan los municipios en los que EH Bildu ha crecido. Los más destacables, además de los navarros, se encuentran en Gipuzkoa, donde encontramos municipios como Errenteria, donde Aizpea Otaegi sucederá a Julen Mendoza con un 16,89% más de apoyos. Lo propio ocurrirá en Azpeitia, Hernani, Oiartzun u Oñati, entre otros.B.Z.

Municipales

346.993

Son los votos de EH Bildu en las municipales de la CAV y Nafarroa. Un 12,24% más que en 2015.

67.515

Las papeletas que EH Bildu logró en las locales en Nafarroa, un 23,48% más.

16,98%

Es lo que ha crecido EH Bildu donde gobernaba en Nafarroa o en la CAV. Donde era oposición ha subido un 9,97%