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GRAN BRETAñA, ANTE EL BREXIT

Johnson promete millones a Escocia frente a la independencia

Boris Johnson, de visita en Escocia, ha prometido 300 millones de libras para esta nación, Gales y el norte de Irlanda para intentar frenar cualquier impulso a la independencia en un contexto marcado por un Brexit sin acuerdo que se acerca de manera casi irremediable. Frente a ello, defiende recuperar los valores de permanecer «en el Reino Unido, la unión política y económica con más éxito de la historia, una marca global que nos hace estar más seguros».

Boris Johnson hizo ayer su primera visita a Escocia desde que asumió su cargo de primer ministro británico con la promesa de aportar nuevos fondos por valor de 300 millones de libras (332 millones de euros) para Escocia y también para Gales y el norte de Irlanda.

En su discurso en Escocia, Johnson pidió «una renovación de los lazos que unen a nuestro Reino Unido», mientras intensifica los preparativos para la posible salida británica de la UE sin acuerdo el 31 de octubre.

Johnson resaltó que su objetivo será impulsar el crecimiento de Escocia, Gales y el norte de Irlanda y potenciar los beneficios de su unión con Inglaterra en el marco del Reino Unido.

«Nuestra unión es la unión política y económica con más éxito de la historia. Somos una marca global y juntos estamos más seguros, más fuertes y más prósperos, así que, mientras nos preparamos para un futuro brillante tras el Brexit, es vital que renovemos nuestros lazos que unen a nuestro Reino Unido», afirmó.

El nuevo premier conservador, que sustituyó a Theresa May el pasado miércoles, insistió en que hará esfuerzos para que cada decisión que tome «impulse y fortalezca la unión» de Gran Bretaña.

Se espera que en los próximos días Boris Johnson también haga una visita similar a Gales y al norte de Irlanda.

Johnson ha dado instrucciones para aumentar los preparativos para una eventual retirada británica de la UE sin pacto, después de que el negociado por May fuera rechazado tres veces por el Parlamento y de que Bruselas dejase claro que no habrá nuevas negociaciones.

La líder de los conservadores escoceses, Ruth Davidson, dijo el fin de semana que comparte la opinión de Johnson de permitir que Gran Bretaña salga de la UE el 31 de octubre sin acuerdo.

La ministra principal de Escocia, la nacionalista Nicola Sturgeon, considera que hay argumentos para pedir otro referéndum sobre la independencia escocesa después que la población de esta nación votase a favor de la permanencia en la UE en la consulta de 2016. Gran Bretaña tenía que haber salido de la UE el 29 de marzo, pero May solicitó una prórroga.

Sturgeon pidió ayer a Johnson que «no conduzca Escocia al desastre» con un Brexit sin acuerdo y aseguró que esta nación fue ignorada durante el proceso.

En una declaración a los medios, Sturgeon señaló que Johnson ha formado en Londres un Gobierno con ministros muy favorables al Brexit y con el único objetivo de sacar a Gran Bretaña de la UE.

«El pueblo de Escocia no ha votado por este Gobierno conservador, no ha votado por este nuevo primer ministro y ciertamente no ha votado por un catastrófico Brexit sin acuerdo que ahora Boris Johnson está planeando», subrayó la ministra principal escocesa.

Sturgeon: «Escocia, ignorada»

Agregó que Escocia «ha sido ignorada durante el proceso del Brexit» y pidió a los escoceses que «se unan para trazar su propio curso» e «impedir que lleven a Escocia al desastre».

En su visita a Escocia, Johnson rechazó que pueda haber un nuevo referéndum sobre la independencia de esta nación, que ya se votó en 2014 con un resultado favorable, por pocos votos, a la permanencia bajo la Corona británica.

«Es cosa de una generación, se votó sobre esa base y creo que sería totalmente equivocado romper ahora esa promesa a los pueblos de Escocia y Reino Unido», argumentó Johnson.

Sobre la nueva relación con la UE tras la salida británica sin acuerdo, Johnson señaló en la localidad escocesa de Faslane, que alberga una base de submarinos, que quiere alcanzar un acuerdo de libre comercio.

«El Acuerdo de Retirada está muerto, pero hay margen para un nuevo acuerdo», destacó el primer ministro británico.

«Lo que queremos hacer es construir una nueva relación con todas las cosas que nos importen, compartiendo cooperación en defensa, seguridad, inteligencia, cultura y ciencia, todo lo que cabe esperar», dijo el premier.

«En el centro de todo ello, debe haber un nuevo acuerdo de libre comercio que nos permita recuperar el control de nuestras tarifas y nuestras regulaciones y hacer las cosas de forma diferente donde queramos», indicó Johnson.

La patronal británica aconseja acelerar los preparativos para el Brexit sin acuerdo

La principal organización patronal británica, la CBI, destacó ayer que un Brexit sin acuerdo es el escenario más probable y presionó a las empresas para que aceleren los preparativos para hacer frente a esta cuestión.

«Incluso si no es posible convertir a nuestra economía en impermeable a todos los daños que provocará la inundación del ‘no deal’ (no acuerdo), podemos poner sacos de arena y protegernos en la medida que podamos», explicó la directora general de la CBI, Carolyn Fairbairn, en el diario “The Times”.

Un Brexit sin acuerdo, escenario en el que trabaja el nuevo primer ministro Boris Johnson es «una posibilidad seria» y, por tanto, según Fairbairn, las empresas deben prepararse para ello de manera urgente.

En un informe publicado ayer, la CBI explica que las empresas de los dos lados del Canal de la Mancha no pueden quedar paralizadas por el retraso en las conversaciones entre el Gobierno británico y la UE.

«Aunque las empresas hayan gastado miles de millones en sus planes de urgencia para una ausencia de acuerdo, están siendo penalizadas por consejos poco claros, el calendario, el costo y la complejidad», según la CBI.

El informe muestra que las grandes empresas de sectores muy concretos como los servicios financieros están en una buena situación, mientras que otros como la agricultura o la industria están muy retrasados.

Por ello, Fairbairn llamó al Gobierno a lanzar una campaña de información dirigida a las pequeñas empresas, la mayoría de las cuales están mal preparadas para hacer frente a un Brexit sin acuerdo.

El objetivo es «que se reduzca el impacto de una ausencia de acuerdo, no que se anule. Es un choque que tendrá repercusiones en los próximos años», añadió Fairbairn.

Johnson cogió el guante y anunció que lanzará «la mayor campaña de propaganda gubernamental desde la Segunda Guerra Mundial» para informar a las empresas y a la ciudadanía de su plan para sacar a Gran Bretaña de la UE sin acuerdo, según informó “The Daily Telegraph”.

El nuevo Ejecutivo de Londres destinará en los próximos tres meses unos cien millones de libras (más de 110 millones de euros) en una batería de anuncios, principal eje de una campaña que avanzaron al diario «The Daily Telegraph» fuentes del Gobierno de Boris Johnson.

Será una ofensiva sin precedentes en las últimas décadas y contará con presencia en radio, televisión y cartelería exterior.

La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, describió esta campaña propagandística del Gobierno británico como «una vergonzosa pérdida de dinero». GARA