De villano secundario a protagonista de una oda a la locura de la anarquía y el caos

Siempre he defendido que las comedias gamberras de Todd Phillips escondían auténticas cargas de profundidad contra el sistema establecido, y no solo lo digo por la trilogía de “The Hangover” (2009-11-13), sino sobretodo por sus primeros documentales, especialmente su dinamitera ópera prima “Hated” (1994), dedicada al representante más asocial del punk, a GG Allin. “Joker” (2019) profundiza más aún si cabe en las anomalías y patologías que genera la sociedad capitalista, de las que este villano de cómic se erige en patético símbolo de destrucción. La película bebe directamente de la contracultura y el cine de los años 70, por eso está tan presente en la caracterización de Joaquin Phoenix el Jack Nicholson de “Alguien voló sobre el nido de cuco” (1975), sin olvidar que también hizo del Joker. Pero la recreación setentera de Nueva York, transmutada en Gotham City, rinde homenaje a Martin Scorsese y sus películas “Taxi Driver” (1976) y “The King of Comedy” (1982), de las que se ha rescatado a Robert De Niro como actor invitado.
Solo Joaquin Phoenix, el mejor actor actual y hombre de las mil caras por excelencia, podía hacer olvidar al mencionado Nicholson y al mito que envuelve al malogrado Heath Ledger. Aunque en justicia también se debe reconocer que la película se ha hecho para él en clave rupturista y provocativa, tanto que pilló con el pie cambiado a la crítica en la Mostra de Venecia, y no así al Jurado que tuvo a bien concederle el León de Oro.
“Joker” (2019) rompe a conciencia con la dinámica del cine de superhéroes, en cuanto reflexión metagenérica sobre el mismo. Se sitúa en los márgenes de la industria de Hollywood desde el momento en que su presupuesto de 55 millones de dólares está por debajo de lo que suelen costar las megaproducciones en las que al villano no se le concede un espacio propio.

El servicio de ambulancias de Osakidetza, de camino a urgencias

Peixoto, euskararen eskutik abertzaletu zen betiereko militantea

El PP amenaza con el exterminio político a EH Bildu y sin tener turno de palabra

El exalcalde de Hondarribia fichó por una empresa ligada a Zaldunborda
