Jon ORMAZABAL
Pelota

Ante la nueva realidad

Aitor Erauzkin, de la Federación Vasca; el ex profesional Fernando Goñi, actualmente en ElkarPelota; Iñaki Pérez de Eulate, miembro dePilotabiz;, e Iker Amarika, de la Emakume Master Cup, comparten sus reflexiones sobre el delicado momento y futuro de la modalidad.

Mientras la mano profesional sigue parada, sin ofrecer pistas sobre su complicado futuro, el resto de la actividad pelotazale sigue trabajando por amoldarse a su nueva realidad. Aprovechamos la pausa por la pandemia para tomar la temperatura a la situación de la mano de cuatro agentes cualificados.

AITOR ERAUZKIN: «UNA OPORTUNIDAD PARA CAMINAR JUNTOS»

La conversación con Aitor Erauzkin tuvo lugar unas pocas horas antes de que la trágica e inesperada muerte de Kepa Arroitajauregi hiciera tambalear los cimientos de la EEPF. Las semanas previas tampoco habían sido sencillas, pues el estado de alarma les obligó a suspender el GRAVNI, «nuestra principal competición de rendimiento, la única que se juega por selecciones de provincias».

Sin embargo, entiende que «los principales perjudicados de toda esta complicada situación han sido los clubes, al final las estructuras más débiles son las suyas, y sus presupuestos y patrocinadores se han quedado en el aire. Además, para empezar, sus pelotaris no pueden practicar su deporte, las instalaciones de estos clubes son públicas y están cerradas».

En el caso de la EEPF los presupuestos de este año parecen asegurados, no así los de 2021, lo que podría llevarles a tener que replantear sus planes a futuro. Y de cara a la vuelta, «incertidumbre» es la palabra que mejor define su situación, tanto económica como de plazos.

Sin embargo, siempre se suele decir que estos tiempos de crisis suelen generar nuevas oportunidades y Aitor Erauzkin entiende que «en los últimos años la pelota profesional y la aficionada están alejadas y quizá puede ser una oportunidad para volver a caminar por el mismo camino, a juntarnos todos los estamentos de la pelota. No empezar de cero, pero sí volver a abrir puentes y comenzar a trabajar en común para fortalecer nuestras disciplinas, es imprescindible para que un deporte minoritario como el nuestro sobreviva».

FERNANDO GOÑI: «CON LA OFERTA QUE HAY, O LLEGAMOS A MÁS GENTE, O...»

El covid-19 obligó a ElkarPelota a suspender no solo los entrenamientos habituales, sino también los campus y actividades veraniegas que tanto éxito tienen en Nafarroa. El ex manista se consuela con que «al no ser una empresa con muchos gastos fijos y como nuestros emolumentos son pequeños, por ahí no nos ha hecho grandes averías. Nosotros estamos para aportar y por ayudar», explica.

Su mayor pena es por todos esos chavales y chavalas que tienen que estar parados porque las instalaciones municipales están cerradas. Eso sí, le queda el consuelo de que en esos pueblos con canchas abiertas, «los frontones sean las instalaciones que más se usen y, de alguna manera, vuelvan a ser un punto neurálgico, de encuentro».

Sobre la vuelta, comparte la incertidumbre mostrada por Erauzkin, apuntando un nuevo enfoque. «Va a ser complicada, por ejemplo, por el tratamiento del material y las infecciones, ¿cómo tratas la pelota que pasa de mano en mano?» apunta. Dentro de lo malo, acostumbran a trabajar en grupos pequeños, lo que les puede beneficiar, pero esperan las directrices sobre deporte escolar, que es por las que, más o menos, se rigen.

En lo que coincide plenamente con Erauzkin es en la petición de unidad de todos los estamentos pelotazales. «Cada uno ha ido a su aire y creo que hay que tener una visión más global. Las empresas han hecho la guerra por su cuenta y han recogido los frutos de todos. Creo que tienen que mirar un poco más a toda la pirámide, a la base, si no funciona abajo, arriba no van a llegar y ellos están más necesitados que nadie de tener buenos profesionales», apunta.

«No vamos a hablar de romanticismos ni de nada por el estilo. Hablamos de la cruda realidad y la pelota es un deporte muy exigente y, con la gran oferta de deportes distintos que hay, o llegamos a más gente, a mayor cantidad de chavales, o...», advierte.

Como ex profesional, se muestra extrañado por la nula voluntad que percibe en las empresas por retomar su actividad. «Se tienen que sentar y buscar la manera de retomar la actividad cuanto antes. No serán las mejores condiciones, pero sabemos que, si otros mueven ficha y al consumidor no le das pelota, va a consumir otras cosas».

IÑAKI PEREZ EULATE: «NO PODEMOS VOLVER A LA NORMALIDAD ANTERIOR»

El estado de alarma obligó a Pilotabizi, entidad que organiza el Nacional de Clubes, a suspender una sexta edición en la que estaban logrando un «salto cualitativo» de proyección a falta de una semifinal y la final. La gran predisposición de patrocinadores y colaboradores han permitido a la organización cumplir sus compromisos y, si la epidemia lo permite, las txapelas se repartirán el 8 de noviembre.

Pero siendo, principalmente, un foro para la revitalización de este deporte, Pérez de Eulate hace hincapié en que, «esta pandemia debe servir para no volver a la normalidad anterior, es decir, a federaciones sin recursos económicos ni humanos, clubes exhaustos y reducidos a su mínima expresión, donde la mayoría funcionan gracias al voluntariado de muchas personas ,pero la gran mayoría están muy cerca de la extinción. Un deporte nuestro, pelota vasca, que tiene un numero de fichas minoritario y, año tras año, en descenso paulatino». Por ello, entiende que los clubes deberían hacer una reflexión conjunta e incluso crear alguna estructura desde la que exigir a las administraciones los recursos necesarios del único deporte con denominación de origen, vasca.

«Esta reflexión no es mía pero me la adueño y la expongo: la pelota debería tener el mismo tratamiento que nuestra lengua, el euskera. Si el esfuerzo por la supervivencia de nuestra lengua no fuese titánico y especial, no podría sobrevivir en un entorno de lenguas tan grandes y universales como el francés ,el inglés o el español». En su análisis ve «que a la pelota no le queda nada para ir a peor», por lo que exige un gran esfuerzo por parte de administraciones y agentes implicados.

«Para empezar, las administraciones deben destinar una partida de 6/8 millones para un plan estratégico que abarque la promoción, para la incorporación de jóvenes a las escuelas de pelota; la formación, donde los clubes instruyan a los jóvenes, la academización, donde formar a técnicos, delegados, monitores...las herramientas imprescindibles en cualquier club».

En cuanto a la proyección, considera necesario un circuito de torneos para los pelotaris en edades amateur, en el que los resultados abrirían puertas a torneos de mayor rango y serviría para que todos los torneos tuvieran un fin y un calendario ordenado y definido.

Sin quitar un mínimo de autoridad a las federaciones, también apuesta por que los clubes de pelota a mano creen una estructura propia como «una asociación de clubes de pelota a mano» y «con dicha asociación y los circuitos mencionados, los deportistas amateurs y los clubes tendrían otros objetivos concretos que no fueran el profesionalismo y producir pelotaris para las empresas».

También exige una profunda reflexión en un campo profesional en el que entiende impera el interés económico inherente al mundo empresarial. «¿Pero es posible que los vascos pongamos uno de nuestros mayores patrimonios en manos de gestores que pretenden hacer negocio? ¿O queremos un deporte, en lugar de un producto, cuyos fines sean deportivos y, por tanto, pelotaris y autoridades deportivas sean los protagonistas en lugar del negocio? Esta es la madre del cordero y lo demás es filosofía aristotélica».

Las experiencias de la herramienta no le hacen ser optimista, pero apuesta por exprimir «los últimos granos de arena del reloj. Creo que la pelota a mano debería tener una estructura de gestión similar al tenis, una asociación de pelotaris profesiones estilo ATP, gestores de frontones por concesión administrativa y campeonatos y torneos retribuidos en concepto de premios».

IKER AMARIKA: «NUESTRA PRIORIDAD ES TERMINAR EL PAREJAS»

La pandemia también cogió al Parejas del Emakume Master Cup a falta de sus dos sus festivales más importantes, las semifinales de pelota goxoa y las finales de goxoa y mixta. Pero sus responsables ya están en marcha y el torneo de referencia del campo femenino será, junto al remonte, el primer test de la nueva pelota que viene. Y es que, según nos cuenta Iker Amarika, «a la espera del permiso de los responsables de Lakua, nuestra prioridad es terminar el Parejas, que lo haremos el 26 de junio en Elgoibar, con las sems, y el 28 en Irun, con las finales».

Estos dos festivales serán, «en principio, a puerta cerrada. Ahora mismo en un frontón con aforo de 500 personas podrías meter 16 espectadores, uno cada 20 metros cuadrados, y no merece la pena. A partir del 8 de junio parece que se podría ocupar un tercio, es decir, 160 personas y habría que valorarlo, pero como la situación cambia día a día, lo que te digo hoy, igual el 8 de junio no vale de nada. Es una pena que pierdas el público presencial, pero los dos festivales los dará ETB en directo e igual eso lo gano en audiencia televisiva», apunta.

Como ex manista profesional, le preguntamos por el futuro de este campo y entiende que «deberán amoldarse a la situación. Ellos, por suerte, tienen la tele y ese aforo es muy grande, habría que mantenerlo. No será fácil, pero deben amoldarse».