Trabajadores y trabajadoras sanitarias, así como la plantilla de limpieza, ambulancias, cocinas y cafeterías de Osakidetza respondieron ayer a la convocatoria de huelga de la mayoría sindical en favor de una sanidad pública de calidad, a pesar de los servicios mínimos impuestos por Lakua, que las centrales calificaron de «abusivos».

Los sindicatos SATSE, ELA, LAB, SME, CCOO, UGT, ESK, SAE y Utese-Fesitess señalaron que la jornada de huelga de los trabajadores de Osakidetza en Araba ha sido un «éxito». Todo lo contrario al Gobierno de Lakua, que ha cifrado su seguimiento en el 8,4% del personal, un porcentaje algo más alto entre el personal de Enfermería (9,1%) y facultativo (8,9%) que entre el resto de categorías (8,1%). Unas diferencias muy condicionadas por los servicios mínimos.

Según los sindicatos, por contra, «muchas y muchos trabajadores de atención primaria la han secundado», y en las subcontratas también se notó la huelga, «por encima de los servicios mínimos abusivos». El 100% del personal de limpieza paró, según sus números.

Tras realizar varias movilizaciones que desembocaron el pasado 3 de octubre en una multitudinaria manifestación en Bilbo, las centrales sindicales consideran que ni Osakidetza ni el Departamento de Salud de Lakua han propuesto «medidas tendentes a aliviar graves deficiencias que sufre la sanidad pública vasca».

La huelga en Araba responde a la convocatoria de los trabajadores de realizar una jornada de huelga en cada territorio de la CAV. El 5 de noviembre hará huelga el personal de Gipuzkoa, y el día 12, el de Bizkaia. En las tres jornadas de huelga, se llevará a cabo una concentración a las 11.00 en los hospitales, y otra a las 13.00 en todos los centros de Atención Primaria.