El consejo de administración de Kutxabank aprobó ayer la propuesta de nombramiento de Eduardo Ruiz de Gordejuela como nuevo consejero delegado en sustitución de Francisco Javier García Lurueña, que llevaba cerca de ocho años en el cargo, un nuevo paso en la configuración del equipo directivo que rodea a Anton Arriola al frente del banco.

Ruiz de Gordejuela, una persona cuya trayectoria profesional está unida a Kutxabank y anteriormente a BBK desde 1992, tiene ante sí el reto de afrontar la estrategia de expansión del banco. Antes de que se haga oficial su nombramiento, el candidato tendrá que superar el examen de idoneidad del Banco Central Europeo, conocido en el sector bancario como “fit and proper”.

En la misma reunión, se agradeció a Francisco Javier García Lurueña la labor desarrollada desde que asumió en 2015 el puesto de consejero delegado. Con contrato como CEO hasta junio, mantendrá su vinculación con el grupo como presidente no ejecutivo de Cajasur.

La marcha de García Lurueña es un nuevo paso en el relevo de cargos de la confianza de su antecesor, Gregorio Villalabeitia. Antes, Arriola designó a José Antonio de Tomás Alonso como director general de Estrategia, la quinta dirección del banco, con el objetivo de posicionar a la entidad frente a las nuevas fórmulas que aparecen en el mercado.

Anton Arriola, presidente de Kutxabank, manifestó que el nombramiento de Ruiz de Gordejuela «se da en un momento de gran fortaleza y oportunidad para Kutxabank, que debe apostar por invertir en futuro, en aras de lograr un mayor crecimiento y una más amplia diversificación de sus fuentes de ingresos».

El presidente viene manifestando que la apuesta de Kutxabank es por «fortalecer orgánicamente nuestras áreas de negocio, y en algunas ya se contemplan nuevos y ambiciosos planes de expansión».