La sección sindical de LAB en Metro Bilbao denunció ayer el aumento de puestos directivos en la estructura de Metro Bilbao. Fija su atención en el último proceso de selección para ocupar el puesto de ‘‘Staff de Dirección’’ a través del cual ha sido elegida la periodista Amaia Artetxe Barkin, que se suma a otros anteriores.

La central criticó que «se está generando una doble escala de valores» entre estos puestos directivos, ocupados por personas «afines» al PNV, y el resto de la plantilla.

Se trata de un puesto vacante durante más de 20 años, que dependía directamente de la Dirección Gerencia y ahora se vincula con la Dirección de Comunicación y Desarrollo de Marca, responsabilidad que ocupa Estibaliz Ortiz Tinoco. Esta periodista llegó al cargo tras abandonar la Diputación de Bizkaia, donde fue directora de Comunicación durante los ocho años que estuvo Unai Rementeria al frente de la institución foral. La nueva incorporación al suburbano también estaba en ese equipo.

Para LAB, la incorporación de ambas periodistas a esta dirección y el aumento de peso en la organización con contrataciones provenientes de otras instituciones públicas demuestra la necesidad del gerente, Eneko Arruebarrena Elizondo, «de tener un mayor control en las comunicaciones». Es más, incide en el incremento de personas dedicadas al área de comunicación.

La compañía pública de transportes se ha convertido en refugio para destacados militantes del PNV. Arruebarrena arribó a la dirección en 2013 tras abandonar la Alcaldía de Leioa, donde se vio salpicado por el polémico caso del polideportivo de Pinosolo.

LAB no pasa por alto que el puesto que ocupa esta periodista desde el lunes «fue creado ad hoc en el año 2000 para la actual vicelehendakari primera y consejera de Cultura y Política Lingüística, Ibone Bengoetxea Otaolea». Desde la marcha de esta al Ayuntamiento de Bilbo como concejala no se había cubierto.