Raimundo FITERO
DE REOJO

Palabras embalsamadas

Imposible modular los pensamientos derretidos por unas temperaturas que obligan a abrir demasiado los bronquios para sobrevivir, lo que provoca una exacerbación de todos los recursos que transportan el caudal sanguíneo, llegando a una exhalación reprimida que choca con una brisa candente que abrasa y deja los labios como esparto a punto de ignición. En estas relativistas condiciones objetivas hay que hundirse hasta tocar el coral de plástico de los fondos enciclopédicos en la búsqueda de palabras embalsamadas por la contrarrevolución más recalcitrante que está sufriendo la decadente civilización occidental del euro y el dólar .

Estamos hechos de emociones, recuerdos marcados en sal, vivencias reformadas en cada mudanza hormonal, sentimientos que se construyen desde la intuición y el ambiente variable de cada circunstancia, pocas certezas que chocan con las muchas dudas, amores que se escaparon por una flor marchitada sin entregar y un conjunto atrabiliario de canciones que se grabaron en un disco cuadrado en la parte más cercana al yo de cada ser humano. Con estos materiales se forma la arquitectura de nuestra personalidad, mientras fundamentamos nuestra existencia en un proceso mecánico ahora digitalizado.Por lo que volver a escuchar el eco de las palabras de los reaccionarios más amplificadas que nunca nos lleva a la sensación de pérdida del tiempo madurado entre ilusiones y avances en los derechos de los individuos y de los colectivos. Tener que insistir es un signo de fracaso, además de una necesidad imperiosa para significarse. Hoy rescato de sus garras la palabra Libertad.