La Diputación de Araba solicitará al Estado español la modificación de la normativa vigente para que las indemnizaciones recibidas por haber sufrido violencia machista puedan eximirse del cálculo de las pensiones no contributivas.

Se trata de una medida que adoptará a raíz de la intervención del Ararteko en el caso de una mujer a la que se le retiró la pensión de invalidez que recibía porque había obtenido una indemnización de 20.000 euros por ser víctima de abusos sexuales.

La intervención de Ararteko se produjo en respuesta a la petición de una ciudadana con una discapacidad del 69% y un “grado 1” de dependencia, que expresó su disconformidad con una resolución del Instituto Foral de Bienestar Social (IFBS), dependiente de la Diputación de Araba, dictada en febrero de este año.

NO DERIVA DEL TRABAJO

El Ararteko considera que la indemnización, aunque fuera un ingreso, no venía derivada del trabajo, ni del capital, ni se incluía explícitamente su computabilidad en la normativa de aplicación. La indemnización, apostilla, tampoco tenía naturaleza prestacional, sino indemnizatoria, y su principal objetivo era reparar los daños causados por la comisión de un delito sufrido por su persona.

A su vez, se trataba de una suma monetaria que no pretendía cubrir sus necesidades básicas de subsistencia, que es la finalidad fundamental de la PNC de invalidez.

El IFBS comunicó al Defensor del Pueblo vasco que solicitará al órgano estatal competente la modificación de la normativa vigente.