Mikel Rico es el octavo jugador del vestuario rojiblanco más utilizado por Ernesto Valverde. Sus 921 minutos -13 participaciones, 11 de ellas como titular, en las que ha conseguido tres goles- le han servido al técnico de Viandar de la Vera para confiarle uno de los puestos de máxima responsabilidad en el once. «Estoy gozando de la con- fianza del míster, la verdad es que no me esperaba entrar de lleno porque no había hecho la pretemporada», reconocía sincero en sala de prensa.

Su concurso está eclipsando al fichaje estrella del Athletic de este pasado verano, Beñat, quien en las últimas jornadas está viendo los partidos desde el banquillo y en algunos ni siquiera participando. El entorno rojiblanco ya está invirtiendo mucho de su tiempo en polemizar sobre la cuestión. «El fútbol es debate y eso siempre va a estar en la calle y en los medios. De lo contrario, no sería fútbol, pero es algo que no me influye», indicó el de Arrigorriaga.

El futbolista, en todo caso, sacó la cara por quien está siendo su valedor en este comienzo de temporada tan positivo para él, al haber llegado el último y haberse encontrado con ser un fijo en el once del Athletic. «Todos queremos jugar y, de momento, el míster apuesta por unos y deja fuera a otros, supongo que tendrá sus razones», argumentó el centrocampista vizcaino.

De todos modos, haría bien en no confiarse demasiado, dada la calidad que atesora ahora mismo la plantilla rojiblanca, especialmente en una medular donde hay un buen ramillete de jugadores con gran capacidad técnica y sacrificio físico. Mikel Rico es consciente de su actual situación y de que «no me veo titular indiscutible porque todos los puestos tienen mucha competencia».

Cuarta plaza

Como ya hiciesen previamente algunos de sus compañeros, el discurso del pivote apostó por no ofuscarse con el objetivo de entrar en Champions. «De momento, no pensamos mucho en ello. Igual que antes del partido contra el Barça, no pensábamos que podíamos ponernos cuartos. La idea es sumar para llegar al final con opciones de todo porque ahora es más cosa de puntos que de puestos», argumentó.

Admitió, sin embargo, que «cuanto más arriba» esté el equipo «es mejor para todos», tanto para los propios futbolistas como para afición y club, si bien «no hay que obsesionarse» con mantener ese puesto que da derecho a jugar la previa de la Liga de Campeones. «Es el tópico de ir partido a partido y ya veremos dónde acabamos. De aquí al final de año quedan seis puntos en juego y queremos sacar los máximos posibles», subrayó el jugador.

La primera de esas dos citas será en el Sánchez Pizjuán, donde el Athletic va a rendir visita coincidiendo con una época de aguas revueltas a cuenta de la condena y posterior dimisión de José María del Nido como presidente sevillista. De cualquier forma, Rico no cree que la coyuntura extradeportiva afecte al conjunto de Nervión.

«Siempre se ve un buen Sevilla, pues, como nosotros, llevan tres victorias seguidas. Vamos con la idea de hacer un buen partido y sacar los tres puntos». Para el futbolista vizcaino, quizás influya más la ausencia de Rakitic en el «gran bloque» conformado por Unai Emery. «Es todo un jugadorazo que marca diferencias», se refirió al croata.