«Los mejores de los peores», galerna punk-rock desde la costa lekeitiarra

Catorce temas, catorce ráfagas de punk-rock aderezadas de jarkore, ska e incluso heavy, componen «Los mejores de los peores» (Baga Biga), el nuevo disco de Txapelpunk. A pesar de ser el sexto trabajo en quince años de carrera, es este el que trae las letras más contundentes, reflejo tanto de la complicada realidad socio-económica como de todo aquello que envuelve a la banda. Este viernes, 7 de marzo, se presentarán en el Jimmy Jazz de Gasteiz.

Si en el anterior disco los Txapelpunk se bautizaron como la «Krem de la krem», en este último, el sexto trabajo de la banda, han optado por concederse una medalla de oro, por ser los más destacados en algo: «Los mejores de los peores»; y es que como dijo ayer Iñigito, en Kalderapeko, durante la presentación del disco, «los mejores de los mejores son los políticos, las multinacionales y demás chusma, por eso nos toca ser los mejores de los peores».

El disco, editado por el sello Baga Biga, está compuesto por catorce temas directos, breves y contundentes donde el punk viene teñido de rock, jarkore, ska y heavy. Algo que, en opinión de Iñigito, alma mater de la banda, es natural ya que «todos los afluentes desembocan en el mismo río».

La crítica social, el amor, la fiesta o el Athletic y su hinchada, todas esas cosas que rodean a los Txapelpunk, se reflejan en esas catorce canciones, siempre dentro de esa línea maestra de «estar a gusto» con lo que hacen y, a la vez, «mole a la peña».

Txapelpunk, en ruta

Nueve meses han empleado en redondear esta nueva entrega del universo punk lekeitiarra que Axular Arizmendi ha enlatado en los estudios AME de Mutriku y Estanis Elortza ha masterizado en Doctor Master de Donostia.

Problemas para compaginar trabajo y música han hecho que Nani ceda el terreno de las seis cuerdas a Txapas, «la bestia de Lekeitio». En opinión de Iñigito, «Txapas se ha adaptado a la perfección. Además, siempre nos anda achuchando para ensayar, para tocar y esto nos hace ponernos las pilas».

Cuentan también con una sección de vientos -Pello, saxo; Aritz, trombón; e Ibon, trompeta- en «Beti aurrera», tema en el cual los riffs guitarreros pedían a gritos unos vientos que los muchachos visualizaron a la perfección incluso antes de entrar al estudio.

Después de un tiempo de pausa y una vuelta reducida a seis o siete conciertos en 2013, Txapelpunk tiene ya cerca de diez conciertos firmados y alguna que otra propuesta para grabar en EEUU y Chile. De hecho, Iñigito afirmó que ya hay varias canciones grabadas en inglés. Más satisfechos se mostraron, empero, el bajista Atrofi e Iñigito, con el asunto de las contrataciones que les están llegando y que, a su parecer, demuestra que la banda está ahí y la gente se identifica con ellos.

Este viernes, 7 de marzo, actuarán en el Jimmy Jazz de Gasteiz. Al día siguiente, estarán en Urduña y, siete días después, en Hendaia. El 20 de marzo,saltarán al escenario de Kafe Antzokia y el 4 de abril al de DOKA.

Cuatro acordes bastan para reventar una canción, divertirse y denunciar

«El primer objetivo de Txapelpunk es estar a gusto con lo que hacemos. Y, el segundo, que a la peña le mole. Cada vez que voy al local con un tema nuevo los del grupo flipan y me echan 100.000 flores. Esto consigue que la composición sea más fácil. Las canciones me han salido así, cortas, con estribillos potentes y pegadizos», comenta Iñigito, voz y alma de Txapelpunk, una de las escasas formaciones que quedan en su tono: punk-rock con mucho de rock and roll de base, además de cuidar las melodías y estribillos. No es street punk, no es Oi!, pero también los seguidores de esta variante pueden sentir el polvo de las botas levantando al tierra al ritmo de canciones como «Manos arriba», una de las más brillantes del nuevo disco o la vertiginosa «Volveremos», que recuerda a la contundencia de los siempre recordados RIP. «Volveremos a juntarnos, volveremos a sentir, volveremos a liarla, llegaremos hasta el fin. Viviremos en la calle, moriremos en la calle». Declaración de intenciones, ritmo veloz preparado para el mejor pogo y una guitarra solista que muestra su habilidad para el punk de alta energía. Txapas se lucirá con sus riffs en otros temas de «Los mejores de los peores». A saco y en moto la sección rítmica e Iñiguito en clave melódica cantando textos sociales e historias de su entorno, a veces en puro metalenguaje. Compromiso y diversión. Txapelpunk incluyen un ska muy pegadizo, un himno para la peña, «Beti aurrera», que sigue la marca de unos Itziarren Semeak. Hablando de himnos, Txapelpunk vuelve a grabar «Piratak Athletic», muy quedona y de letra muy apropiada. Ramones y MCD también se dejan ver entre los sonidos lekeitiarras, como sucede, respectivamente, en «Hotel rejas» o «Soldier». P.C.