Aru, el nuevo Montecampeoni
El joven de 23 años de Cerdeña se confirmó como candidato de futuro para las grandes al ser el más fuerte en un final muy exigente.

Fabio Aru confirmó ayer las expectativas que le apuntan como un futuro corredor de grandes vueltas al ganar la larga decimoquinta etapa del Giro, de 225 kilómetros, con final en un puerto de gran dureza como el Plan de Montecampeoni.
El joven corredor de Cerdeña hizo suyo el nombre del puerto de 19 kilómetros al 7,8% que demostró que las fuerzas entre los mejores están igualadas, aunque apuntó tendencias. Nairo Quintana, sin ser el corredor del último Tour, recortó 23 segundos a Urán, que mantiene su regularidad y su liderato, pero cede terreno, como Rafal Majka y Cadel Evans, que va de más a menos, mientras que la opción de Pozzovivo perdió ayer fuerza.
Pero al que hay que incluir en la lista de aspirantes a ganar el Giro tras la etapa de ayer es a Fabio Aru. Atacó a tres kilómetros de la meta y nadie pudo seguirle y se colocó cuarto en la general a 2.24 de Urán. Lo más importante es que va a más, que es lo difícil en un corredor tan joven, de solo 23 años.
Aru, nacionalista sardo, se convirtió en el primer corredor de la Isla en ganar una etapa en el Giro. Ya demostró su capacidad de resistencia y su nivel en la alta montaña el año pasado en su debut en el Giro, en el que fue el mejor apoyo que condujo a la victoria de Vincenzo Nibali.
Sin trabajar para su líder esta temporada, fue vigésimo en la Volta a Catalunya, séptimo en el Giro del Trentino y ayer logró su victoria más importante como profesional en una carrera que deja en evidencia el relevo generacional. Con su compañero Nibali concentrado en la disputa del Tour, Basso y Scarponi van a menos y Fabio Aru se confirma como alternativa de futuro a esos corredores.
Trabajo de BMC sin respuesta
Porque el joven sardo no ganó una etapa cualquiera ni tuvo el permiso de nadie. Se impuso en el puerto más duro subido hasta ahora en este Giro y tras ser el más fuerte en el grupo de los favoritos, en el que BMC trabajó fuerte para endurecer la subida final sin que Evans respondiera al esfuerzo de sus compañeros en los kilómetros finales.
El australiano ya se quedó cuando Pierre Rolland atacó a cinco kilómetros de la meta para irse a buscar a Deignan (Sky), que había saltado a mitad del último puerto tras quedar frustrada la escapada de la jornada formada en su fase inicial por Cunego (Lampre), Bouet (Ag2), Ratto (Cannondale), Le Bon (FDJ), Cardoso (Garmin), Hansen (Lotto), Geschke (Giant), Paolini (Katusha) y Felline (Trek), a los que luego se unieron Rodríguez (Androni), Barbin (Bardiani) y Torres (Colombia).
De todos ellos Cunego era el mejor colocado a 10.32 de Urán y el pelotón les dejó coger una ventaja máxima de siete minutos. El Neri, único invitado que no entró en la fuga, tiró como castigo y fue el BMC el que acercó al final el pelotón a la fuga.
A falta de tres kilómetros saltó Aru, al que solo respondió Urán en primera instancia y después Quintana, pero luego el de Astana se marchó en solitario hasta la meta. El de Movistar dejó al líder, al que consiguió distanciar en 19 segundos, a los que sumó cuatro de bonificación por el tercer puesto.
Quintana reforzado
El colombiano del Movistar ha sido el segundo triunfador de los Alpes junto a Fabio Aru porque llegaba con muchas dudas tras vivir una primera mitad de Giro complicada por las secuelas de las caídas y un resfriado y en los dos finales en alto ha recortado 46 segundos a Majka, 48 a Urán, 58 a Pozzovivo y 1.14 a Evans. Solo Fabio Aru le ha metido 25 segundos y el sardo y el colombiano del Movistar se presentan como las principales amenazas para Rigoberto Urán.
Lo más importante es que la carrera entrará mañana en su fase decisiva con siete corredores en un margen de escasos tres minutos, una diferencia que solo mañana se puede registrar entre algunos de ellos.
El Giro vive hoy su jornada de descanso y mañana llega una de las etapas más esperadas, la que no se pudo disputar el año pasado. Solo 137 kilómetros con las ascensiones a dos colosos como el Gavia (16,5 kms. al 8%) y el Stelvio (21,7 kms. al 7,2%) antes de la subida final a Vall Martello con 22,3 kilómetros al 6,4%. Casi no hay ningún tramo de llano.

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