Cuando las noticias brillan por su ausencia, siempre hay quien opta por fabricarlas. Así, frente al dilatado silencio del president sobre el día en el que firmará el decreto de convocatoria de la consulta del 9 de noviembre, el diario «El Mundo» optó ayer por afirmar en su principal titular de primera página que Artur Mas tiene previsto convocar para ese mismo día elecciones anticipadas. Esa opción es legalmente imposible -al no tener ley electoral propia, Catalunya se rige por la estatal, que establece un plazo de 54 días entre la convocatoria y la jornada electoral-, por lo que el portavoz del Govern, Francesc Homs, se apresuró a negar rotundamente la «primicia», consciente de las ampollas que una decisión así podría levantar entre sus socios. Homs se limitó a señalar que el decreto llegará entre hoy y el sábado.

El mismo diario dedicó otra pieza a dar pábulo al rumor de que los bancos catalanes estudian marcharse en caso de independencia, lo que negó el Banc Sabadell. Este juego de afirmaciones y desmentidos es reflejo del nerviosismo que se ha instalado en Madrid, donde el Gobierno del PP espera la convocatoria soberanista con el recurso ante el Constitucional a punto.

Mientras en la capital española se suceden las reuniones -el lunes entre Rajoy el líder del PSOE, Pedro Sánchez; y hoy entre Sánchez y Josep Antoni Duran i Lleida-, en Barcelona nadie espera a que llegue el decreto para preparar las intensas jornadas que vienen. Empezando por la sociedad civil -la campaña «Ara es l'hora» sigue reclutando voluntarios- y el ámbito local, que esta semana aprueba en masa mociones en defensa de la consulta -lo harán, al menos, 782 de los 947 municipios-.

Ganando nuevos adeptos

En la arena política, tras el visto bueno del líder de ERC, Oriol Junqueras, a la estrategia de Artur Mas, republicanos y convergentes negocian una campaña conjunta a favor del SíSí (sí al Estado catalán, sí a que sea independiente), a la que de momento no se sumará Unió, enfrascada como está en el debate sobre su posicionamiento ante la consulta. Este debate también se da en el seno de ICV-EUiA, pero los ecosocialistas ya han decidido que lo resolverán con una consulta interna una vez que el president convoque la cita del 9N.

Con el transcurso del tiempo, la consulta continúa ganando adeptos inesperados. Si la semana pasada fueron estrellas del deporte como los hermanos Gasol o Xavi Hernández, ahora han sido personajes de la farándula como los televisivos Jorge Javier Vázquez y Risto Mejide o el cantante Joaquín Sabina quienes se han mostrado a favor de que los catalanes sean consultados.

Apoyos que llegan en la línea del resultado de una encuesta de la Generalitat realizada en mayo, pero publicada esta semana, en la que tres de cada cuatro ciudadanos apoyan la consulta y casi un 60% se muestra a favor de que Catalunya se convierta en un Estado. Datos que pueden crecer con la actitud de la que ayer mismo dio ejemplo el ministro de Defensa, Pedro Morenés, quien se trasladó a Catalunya para reivindicar el Ejército como «instrumento útil» para el Gobierno español.