Agustín GOIKOETXEA BILBO
Presoen elkartasunaren kontrako operazio poliziala

Sare exige a los jueces la devolución de la colecta del sábado e inicia otra

Sare acudió ayer a los juzgados para interponer un recurso para que se le entreguen los cerca de 90.000 euros que la Guardia Civil le requisó en la sede del sindicato LAB en Bilbo. Con ese dinero, cuya cuestación había sido pública, se pretendían abonar los gastos derivados de la multitudinaria movilización del sábado. Conscientes de que tardará en llegar esa devolución, «dada la lentitud a la que nos tiene acostumbrados la Justicia», han emprendido una nueva colecta. En Catalunya también la CUP ha promovido un crowdfunding.

La cuestación -dijeron Arantza Aldezabal y Joseba Azkarraga, en nombre de Sare- pretende ser también «una respuesta a quienes se han llevado nuestro dinero. Literamente hablando, el dinero de miles de personas». Esa iniciativa está abierta a toda persona solidaria, «sea cual sea su ideología, y desde el lugar donde se encuentre».

Tal y como han venido explicando tanto Sare como LAB desde el mismo lunes, Azkarraga recordó que el dinero se dejó en la sede el sábado por la proximidad con la entidad financiera donde se iba a depositar, incidiendo en que LAB no tiene otra responsabilidad que haber cedido sus locales para guardarlo.

Su requisa la atribuyeron a la Guardia Civil y manifestaron al respecto que si pretendían intimidarles o asustarles, «les decimos muy claro y muy alto que han conseguido todo lo contrario». «Hoy Sare es una red más fuerte. Más convencida y comprometida con la solución. Una red que continuará avanzando sin miedo, para conseguir un escenario de paz y convivencia», aseguraron Aldezabal y Azkarraga, acompañados por decenas de ciudadanos que participan en esa iniciativa plural por los derechos de los presos y en contra de la dispersión.

Enmarcaron la operación en una respuesta planificada del Gobierno español tras el previsible éxito de la movilización del sábado -que luego quedó corroborado en las calles de Bilbo-, la decisión del Supremo sobre el cómputo de penas de los presos vascos y la próxima manifestación de la AVT para marcar al Ejecutivo del PP. «Estamos ante una clara persecución ideológica. Y no creemos en las casualidades», enfatizaron.

Otros 1.800 euros en LAB

Para Sare, esta respuesta gubernamental se basa en «la venganza» y se enfrenta al escenario que la inmensa mayoría de la sociedad desea. En esa línea, anunciaron que apoyan la manifestación del sábado.

Movilización de Donostia que promueve LAB entre otros. En rueda de prensa en la capital guipuzcoana, Ainhoa Etxaide criticó la falta de apoyo al sindicato de Lakua, CCOO y UGT tras el registro de su sede. También denunció que los guardias civiles se llevaron 1.800 euros de una caja fuerte, sin que en el acta figure esa incautación.

Etxaide incidió en la «indefensión» a la que se enfrenta la central, a la que ocuparon «durante trece horas» con un auto judicial «tan general que les permitía hacer lo que quisieran». Respecto al Ejecutivo Urkullu, censuró que haya «priorizado la lealdad al Gobierno español. Es muy grave y le hacemos un llamamiento para que se sume a la manifestación».

En Leioa, Kurkudi Kultur Elkartea denunció el registro de su local, que se fundamentó en «una justificación falsa».

Arraiz: «La única amenaza violenta aquí, la de la Guardia Civil»

El TSJPV comunicó ayer el cierre definitivo del sumario que ha perseguido al presidente de Sortu, Hasier Arraiz, durante más de un año. Se investigaban sus valoraciones sobre la trayectoria de la izquierda abertzale en estos 35 años hechas en una charla en Bilbo. La Sala de lo Civil y lo Penal rechaza ahora el último recurso de Dignidad y Justicia subrayando que Arraiz hizo únicamente «un análisis político» y que la izquierda abertzale es un sector aceptado como legal y que no cabe equipararlo con ETA.

Este carpetazo, tras sucesivas idas y venidas, llega cuando precisamente está en marcha una nueva ofensiva judicial contra Arraiz por su afirmación de que la sociedad vasca debe dar «jaque mate a la Guardia Civil». En rueda de prensa ayer tarde en Gasteiz, el presidente de Sortu lamentó irónicamente que Madrid no sepa entender «metáforas y juegos de palabras» y que ello le provoque además «dolor de tripas» al ministro del Interior. Y ya en tono serio, el presidente de Sortu recalcó que «la única amenaza violenta» hoy es Euskal Herria «es la de la Guardia Civil y el resto de los cuerpos represivos del Estado». Por ello incidió en la demanda de «que se vayan». GARA