A los hombres de negro les sale absolutamente todo mal
Los bilbainos encajarron un parcial de 22-0, y pese a arrimarse del 64-32 al 64-50, cayeron con estrépito.
UCAM MURCIA 91
BILBAO BASKET 65
Absolutamente todo les salió mal a los hombres de negro, para cerrar una semana simplemente digna de olvidar. Todo se fastidió con un parcial de 22-0, del 22-18 al 44-18 del segundo cuarto, que mediatizó el partido. Más aún, cuando los hombres de negro lograron endosar un 0-18 a su rival -del 64-32 al 64-50-, nada cambió, porque UCAM Murcia no tardó en adquirir los 30 puntos de ventaja.
A cuenta de las ausencias de Dejan Todorovic y Latavious Williams, así como la merma física de Marko Todorovic por gripe, Sito Alonso acometía el partido de Murcia con Wragge en el quinteto titular y defendiendo en zona 2-3. No le resultó del todo bien el truco al técnico bilbaino, ya que aunque incomodó la conexión entre Neto y Lima, Radovic campó a sus anchas dentro y fuera de la zona. Pero al menos seguía en el partido.
A partir del 24-18, el choque entró en otra dimensión. Kelati, Bamforth y Neto hicieron y deshicieron en ataque -sumaron 9 de sus 12 triples-, mientras que Radovic y Lima cerraban a taponazo limpio su canasta. Bilbao Basket se pasó siete minutos del segundo cuarto sin anotar, y para cuando lo hizo, era tarde, llegándose 52-28 al receso. En esos minutos los bilbainos perdieron 12 de sus 19 balones.
La renta pimentonera se estiró hasta los 32 tantos, 64-32, y en esas, el UCAM Murcia se echó a dormir. A pesar del infame día de los bases -Colom y Raül López sumaron un -12 de valoración-, con Marko Todorovic y Hervelle de banderas de la dignidad, los de Sito Alonso se arrimaron 64-50.
Y punto. El fin del tercer cuarto hizo que los locales respiraran, y respondieran con un parcial de 16-0, cerrando la peor semana de Bilbao Basket.
«Estoy indignado por el trato recibido»
La rueda de prensa de Sito Alonso se dividió en dos fases. Por un lado, su análisis, y por el otro, su indignación por el trato que, al parecer, su equipo recibió al final del choque. «Intentaremos no hacerlo nosotros», añadió.
«Estoy muy indignado por cómo nos han tratado aquí después del partido», dijo, epatando a unos periodistas que insistieron en preguntar, ya que el de Monzón lo relacionaba con todo lo sucedido durante la semana. «Sobre este tema estoy tan indignado que prefiero no hablar. Habíamos pensado en tomar alguna medida, aunque no lo vamos a hacer. No tenemos la sensación de que nos merezcamos todo lo que estamos pasando. Vamos a intentar olvidarnos de la atmósfera que se ha creado», remachó.
Sobre el análisis del partido en sí, intentó sacar la parte positiva. «En el segundo cuarto no hemos podido mantener la calma, lo que ha supuesto llevar una desventaja muy grande. Pero lo sorprendente es que nos hemos puesto a 14 puntos y ahí hemos vuelto a creer. Ya ante el último arreón suyo, hemos sido incapaces de hacer frente», acabó. A. G.
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