La exgimnasta rusa Larisa Latynina, que perdió el martes su condición de máxima medallista olímpica de la historia, deseó buena suerte a Michael Phelps y dijo que sabía de sobra que el nadador estadounidense le quitaría su récord (18 medallas) algún día.
«Me había preparado para ello, no me da ninguna pena», declaró a AFP Latynina, traducida por su hija Tatiana antes de asistir al concurso masculino de gimnasia artística.
«Habría preferido que el récord me lo quitara un deportista ruso, pero estoy muy contenta por él. Quiero desearle una vida normal, lo que es la cosa más importante. La vida es la vida. Todo el mundo tiene días mejores y días peores, pero lo más importante es ser una persona normal», añadió.

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