Ya se conocía que el proyecto de ampliación del metro de Sarratu al Hospital de Usansolo era uno de los incluidos por el Gobierno Urkullu en el programa Euskadi Next 21-26. Un encuentro de trabajo entre el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, y el consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola, ha servido este miércoles a ambos responsables institucionales para publicitar ese candidatura y escenificar el trabajo en común entre ambas administraciones.

Curioso el afán por destacar una de las 188 inversiones que se incluyen en el programa que opta a los Fondos Next Generation EU, con una hipotética inyeccción por valor de 5.702,6 millones de euros cuando el propio Rementeria ha reconocido que «los fondos europeos no pueden convertirse en el cuento de la lechera», precisando que no tienen nada seguro. Amplia exposición de la propuesta para luego decir que «no es prudente hablar demasiado».

Lo ha hecho Rementeria, que ha confesado que sin la inyección europea no se podrá acometer la Línea 5 de metro a Galdakao «a corto plazo», las prioridades del Gobierno foral PNV-PSE son otras, tal y como viene repitiendo en varias ocasiones en las Juntas Generales. Su esperanza es que el Ejecutivo español incluya el proyecto entre los prioritarios y que la UE lo considere así.

Rementeria ha indicado que tanto la Diputación como el Gobierno autonómico van a hacer «lo posible y lo imposible» por conseguir ese dinero para desarrollar la Línea 5, si bien ha aclarado que ambas instituciones no pueden sacar adelante ese proyecto a corto plazo sin el respaldo de Europa, ya que los efectos económicos de la pandemia han condicionado las posibilidades de las administraciones.

«Gran oportunidad»

Diputación de Bizkaia y Lakua entienden que es «una gran oportunidad» que hay que aprovechar para que la UE aporte el 70% de los 350 millones de euros que cuesta la extensión del suburbano hasta el hospital de Usansolo, donde se conectaría con el actual trazado de EuskoTren, que será quien opere la línea como lo hace con la que discurre de Kukullaga, en Etxebarri, a Matiko, en Bilbo.

Sería, han apuntado, 245 millones de euros de financiación europea, aunque la partida final puede ser inferior, aportando ambas instituciones vascas los 105 millones restantes. «No podemos perder la ocasión», ha reiterado Iñaki Arriola, quien ha comentado que la actual línea de EuskoTren entre Usansolo y Sarratu, en Basauri, pasaría a ser operado solo por trenes de mercancías.

«Si se produce el visto bueno de Europa, el objetivo es poder sacar a licitación antes de final de este año y acometer la obra de forma que antes de que a finales de 2026 pudiera estar acabada», ha indicado Arriola.

En la misma comparecencia, el consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes ha avanzado que, en febrero, Euskal Trenbide Sarea (ETS) arrancará con un proceso participativo para definir el trazado en la Línea 4 del metro, desde la estación de Abando a Zorrotza, pasando por los barrios bilbaino de Irala y Errekalde, que aprovechará los trazados de Feve en el subsuelo de la capital vizcaina.

 Estudio Línea 4

Arriola ha adelantado que su departamento ha concluido la primera fase del estudio informativo de la Línea 4, que contempla dos alternativas de trazado entre Abando y Zorrotza, una que utiliza funiculares para conectar los centros de Errekalde e Irala con el actual trazado de cercanías y otra que plantea una variante de trazado de esa misma línea de cercanías con dos estaciones en caverna en los dos centros urbanos mencionados.

El consejero ha incidido en que, al igual que en el caso de la futura línea 5 que conectará con el trazado de EuskoTren que da servicio de Durangaldea y Busturialdea, la línea 4 se comunicaría con la línea de Feve a Enkarterriak. Este proyecto, ha reconocido, necesita todavía de mucha tramitación administrativa y técnica, además de que el Gobierno español traspase a Lakua competencias ferroviarias como la de la antigua Feve.