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ELA critica el alineamiento con la patronal y las cargas desproporcionadas de la Ertzaintza

ELA-Ertzaintza ha presentado este miércoles una declaración crítica con el modelo implantado por el Gobierno Urkullu. Deplora las cargas «desproporcionadas» pero también otros aspectos como el «alineamiento» con intereses empresariales.

Concentración por otro modelo policial ante la sede de Lakua en Bilbo. (Aritz LOIOLA/FOKU)
Concentración por otro modelo policial ante la sede de Lakua en Bilbo. (Aritz LOIOLA/FOKU)

En un momento en que el Gobierno Urkullu dice ver una campaña de «odio» contra la Ertzaintza, la autocrítica ha salido de su propio seno. ELA-Ertzaintza ha presentado este miércoles una declaración ante la sede del Ejecutivo de Lakua en Bilbo en la que pide otro modelo policial y asume que se están produciendo cargas que no son «proporcionadas» y sometimiento a intereses empresariales.

Entre otros aspectos, ELA reprocha que «representantes sindicales, electos legitimados y con derechos reconocidos por la ley han sido cacheados por la Ertzaintza antes de mantener reuniones con empresarios y con representantes del Gobierno Vasco. Evidentemente, no se cachea ni a empresarios ni a representantes de la administración», expone.

«Se ha impedido a los piquetes realizar la tarea que la jurisprudencia les reconoce como propia y ajustada a la ley, como es la de informar a los trabajadores que no secundan la huelga y acuden a sus centros de trabajo», continúa.

«El Departamento de Seguridad no da cobertura y dificulta el trabajo de los Comités de Huelga en el ejercicio de los derechos que la ley prevé, como por ejemplo, el control de decisiones ilegales que las empresas pueden estar tomando contra el ejercicio del derecho de huelga, como puede ser la sustitución de trabajadores», añade al respecto.

La declaración hace hincapié igualmente en que «en situaciones no especialmente críticas, ha habido cargas y golpes desproporcionados por parte de la policía». Y añade que «agentes recibieron ordenes de impedir la entrada al Parlamento Vasco de representantes legales de los trabajadores que habían sido invitados por parlamentarios».

Con todo esto, creen que «se están vulnerando normas y principios deontológicos básicos como la no discriminación, la proporcionalidad en el uso de la fuerza y el respeto y la salvaguarda del ejercicio de derechos fundamentales. Y, como consecuencia, las decisiones aparecen claramente alineadas con los intereses empresariales».

Además, advierten de que «si no se corrigen las decisiones del Departamento, la legitimación social de la Ertzaintza está en riesgo para perjuicio de la toda la ciudadanía y de la propia Ertzaintza».

Cargas y golpes, método habitual

La concentración de ELA se ha celebrado un día después de que la Policía autonómica cargara, una vez más, contra trabajadores en huelga, en este caso los de Petronor. Durante los últimos meses, ha sido habitual ver a la Ertzaintza actuar violentamente contra piquetes y manifestaciones, como en la concentración de los trabajadores de Tubacex ante el Parlamento de Gasteiz, la huelga de PCB en Barakaldo –que terminó con un representante de CCOO con la nariz rota– o la convocatoria de Ernai contra la precariedad juvenil en Bilbo, que se saldó con dos participantes hospitalizados.