El Ministerio español de Educación ha remitido a los gobiernos autonómicos el borrador del decreto que regulará las enseñanzas de Bachillerato, a fin de que estos realicen sus aportaciones. Las modificaciones se implantarán para el primer curso en el año académico 2022-2023 y para el segundo curso, en 2023-2024.

El documento señala que el objetivo de esta etapa no será solo «la mera adquisición de contenidos», sino aprender a utilizarlos para solucionar «necesidades encarnadas en la realidad».

El texto contempla que se pueda pasar de primero a segundo con un máximo de dos asignaturas suspendidas. En todo caso, deberán matricularse en segundo curso de las pendientes de primero.

Para conseguir el título habrá que aprobar todo, pero el documento refleja que «excepcionalmente, el equipo docente pueda decidir la titulación de un alumno que haya superado todas las materias salvo una».

Para esto último deben cumplirse una serie de condiciones: Que el alumno ha alcanzado los objetivos y competencias adecuados a este nivel; que no haya habido una inasistencia continuada y no justificada; que se haya presentado a las pruebas y hecho las actividades necesarias para su evaluación y que la media aritmética de las calificaciones en todas las materias sea igual o superior a cinco.

Aunque el Bachillerato son dos cursos, el borrador da la opción de hacerlo en tres años a alumnos que cursen la etapa de manera simultánea a las enseñanzas profesionales de música; que acrediten la consideración de deportista de alto nivel o de alto rendimiento; que precisen una atención diferente a la ordinaria por tener alguna necesidad de apoyo educativo y que aleguen otras circunstancias que justifiquen la aplicación de esta medida.

Se amplían las modalidades del Bachillerato, que serán Artes, Ciencias y Tecnología, General y Humanidades y Ciencias Sociales. A su vez, Artes se desdobla en Artes Plásticas, Imagen y Diseño; y Música y Artes Escénicas.

Las competencias que deben haberse adquirido al término del Bachillerato son: comunicación lingüística; plurilingüe; matemática y en ciencia, tecnología e ingeniería; digital; personal, social y de aprender a aprender; ciudadana; emprendedora, y en conciencia y expresión culturales.

Este perfil deberá contribuir a que el alumnado desarrolle capacidades como «tener una actitud responsable a partir de la toma de conciencia de la degradación del medioambiente, identificar aspectos relacionados con el consumo responsable, desarrollar hábitos de vida saludable, ejercitar la sensibilidad para detectar situaciones de inequidad y exclusión, entender los conflictos como elementos connaturales a la vida en sociedad que deben resolverse de manera pacífica, aceptar la incertidumbre como una oportunidad para articular respuestas más creativas, cooperar y convivir en sociedades cambiantes o desarrollar las habilidades que le permitan seguir aprendiendo a lo largo de la vida».