Tras meses de tensión y recriminaciones cruzadas, el presidente del Athletic Club, Jon Uriarte, ha comparecido este miércoles ante los medios de comunicación para analizar la situación con la grada popular de animación e intentar establecer su relato sobre el conflicto. Ha citado al colectivo Iñigo Cabacas Herri Harmaila a una reunión para la semana que viene y ha adelantado que irá con un documento de condiciones y compromisos.

Sin especificar el contenido exacto de ese documento, Uriarte, acompañado por el Director General, Jon Berasategi, y la Directora del Área Social, Johana Ruiz-Olabuenaga, ha enumerado lo que ha calificado como los «los seis principios básicos» del Club ante cualquier cuestión relacionada con la Grada Popular de Animación de San Mamés: «el respeto como principio fundamental; la Grada Popular de Animación es del Athletic; la Herri Harmaila está para animar; ninguna queja justifica abandonar al equipo; el interés del Athletic es lo primero; y la puerta está siempre abierta al diálogo». Unos principios tan básicos como subjetivamente interpretables.

El presidente ha negado rotundamente que haya algún tipo de represión contra la Herri Harmaila, tal y como lleva tiempo denunciado ICHH. Ha defendido las actuaciones realizadas por la seguridad privada del club e incluso ha justificado la actuación de los antidisturbios de la Ertzaintza dentro de San Mamés tras el partido contra el Real Madrid el pasado 4 de diciembre.

En un intento por poner en la picota a ICHH, los directivos del Athletic también han hecho mención a las multas que ha recibido el club por incidentes relacionados en las gradas. Berasategi ha explicado que el club ha recibido 30.000 euros de multa por los incidentes en Roma, otros 30.000 por incluir petardos en el tifo de la final de Copa (sanción que todavía no es firme) y oros 25.000 por otros cinco incidentes menores como cánticos ofensivos o insultos (que tampoco son firmes). Sin embargo, los directivos han obviado que estos incidentes no están directamente ligados a ICHH y, de hecho, consta que esos cánticos ofensivos no son iniciados por los dinamizadores de la animación de la Herri Harmaila.

Respecto a la "huelga” realizada por ICHH en algunos partidos, el empresario bilbaino ha indicado que «ninguna queja justifica abandonar al equipo». «ICHH dice que si protestan de otra manera no se les hace caso. Así que lo importante es que te hagan caso, ¿no? ¿Lo importante es lo tuyo aunque perjudiques al equipo? ¿Lo importante es tu protesta, aunque abandones a los jugadores que no tienen culpa?», ha añadido.

Respecto a ello, el colectivo ya ha explicado en varias ocasiones que han sido las constantes sanciones y multas recibidas por los dinamizadores de la animación lo que les ha llevado a esa situación.

Pese a todo, Uriarte ha lanzado la convocatoria de la reunión para la próxima semana, y ha asegurado que en los próximos días hará público el documento que llevará a ella. Asimismo, también se reunirá con otros grupos de animación presentes en la grada popular, como Piratak y Euskal Lyons.

El presidente rojiblanco no cree que este conflicto vaya a suponer la desaparición de la grada de animación. «Seguro que no. Creemos que la creación de esa grada fue algo positivo», ha recordado.

«Soy optimista porque lo que estamos pidiendo es algo de sentido común. La sensación que tengo es positiva y se va a llegar a una solución. Lo que queremos es que en San Mamés haya animación y que se haga con respeto», ha dicho Uriarte, añadiendo que en el Athletic «el respeto no es negociable, como la filosofía de la entidad».