
El Consejo de Ministros español ha aprobado este martes la aportación de 75 millones de euros por parte de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) a Talgo, y solicitada por esta empresa, con el objetivo de facilitar el cambio de los dueños del fabricante de trenes y poder así impulsar su capacidad industrial.
La SEPI ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) esta autorización por parte del Gobierno: «La inversión toma especialmente en cuenta el conjunto de tecnologías y capacidades industriales con que cuenta Talgo, haciendo de esta compañía un actor clave para la movilidad ferroviaria en España».
La aportación de la SEPI se traducirá en 45 millones de euros a través de una ampliación de capital de Talgo, así como en otros 30 millones de euros mediante un préstamo convertible en acciones.
La ampliación se llevará a cabo con exclusión del derecho de suscripción preferente mediante la emisión y puesta en circulación de un máximo de 10.588.235 acciones de 0,301 euros de valor nominal cada una de ellas, de la misma clase y serie que las actualmente en circulación y a un tipo de emisión de 4,25 euros por acción, lo que equivale a un porcentaje accionarial de 7,87 % sobre el capital social ampliado.
En cuanto al préstamo de 30 millones, será también con exclusión del derecho de suscripción preferente, a un tipo fijo del 10,21 % anual, capitalizable y pagadero al vencimiento a 8 años (con eventual extensión a 10 años), en efectivo o con entrega de acciones (precio de conversión a 8 años o a valor de cotización con descuento del 30 % a 10 años), todo ello a decisión de Talgo.
Existen condiciones
No obstante, la SEPI remarca que esta inversión está sujeta al cumplimiento previo o simultáneo de una serie de condiciones, entre ellas el cierre de la compra por parte del consorcio liderado por el grupo industrial vasco Sidenor (junto al Lakua y las fundaciones BBK y Vital) de un 29,77 % del capital de Talgo, actualmente en manos del fondo Trilantic, que lleva años buscando vender sus acciones. Este consorcio también tendrá que suscribir otras obligaciones convertibles de 75 millones de euros, en las mismas condiciones que la SEPI.
Asimismo, las entidades financieras de Talgo deberán aprobar una nueva estructura de endeudamiento integrada en dos tramos: financiación de 650 millones con vencimiento a 6 años y una línea de circulante de 120 millones con vencimiento a tres años, con extensión automática durante dos años más.
Adicionalmente, se concederá una nueva línea de avales por parte de las entidades financieras de 500 millones de euros para que la aportación de la SEPI se materialice.
Salida industrial
«Esas fortalezas permiten sostener el plan de negocio que tiene previsto para los próximos años. Su ejecución será impulsada por un consorcio inversor de marcado perfil industrial y se verá facilitada por una restructuración financiera que se ha proyectado para permitir acomodar el calendario de vencimientos y los recursos disponibles a la cartera de pedidos ya contratada», justifica la SEPI a la CNMV.
Todo ello aportará los recursos necesarios para incrementar la capacidad industrial de Talgo, que en los últimos años se ha visto comprometida debido al elevado volumen de proyectos en cartera, y de esta forma poder dar salida a los pedidos que los operadores ferroviarios le piden. En este sentido, Renfe impuso una multa de 116 millones de euros a Talgo por entregar unos trenes con más de dos años de retraso, lo que dificultó el cierre de la venta de Trilantic e impactó en las cuentas de la compañía.
Asimismo, el Gobierno español vetó hace un año la venta de la compañía a un consorcio húngaro (Magyar Vagon), aduciendo razones de «seguridad nacional y orden público». Por todo ello, y por las peticiones desde Lakua, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha decidido entrar en el 'rescate' de Talgo, con el fin de ayudar a una empresa que considera estratégica para el país.
Lakua: «Paso firme»
Para el Gobierno de Lakua, la aportación de la SEPI supone un «paso firme y decisivo», en palabras del consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, para el arraigo y futuro desarrollo industrial de la compañía ferroviaria.
«Desde el Gobierno Vasco valoramos positivamente que SEPI haya aceptado la invitación de Talgo para reforzar su estructura financiera mediante una ampliación de capital y emisión de obligaciones convertibles en acciones», ha señalado Jauregi.
El consejero ha apuntado que esta inyección resulta «imprescindible» para reforzar y expandir la capacidad industrial de la empresa, a la par que «garantizar los miles de puestos de trabajo directos e indirectos que genera esta empresa».

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