ALC plantea «repensar» la ubicación del Guggenheim en Murueta ante el rechazo constatado
El primer informe del proceso de escucha llevado a cabo por Agirre Lehendakaria Center en Urdaibai deja claro que la ubicación del Guggenheim en Murueta genera un rechazo «transversal» en la zona. A tenor de los resultados, se plantea «repensar la localización, dimensión y naturaleza» del museo.
Las conclusiones del informe preliminar presentado este miércoles en Gernika sobre el proceso de escucha encargado por la Diputación de Bizkaia y el Gobierno de Gasteiz a Agirre Lehendakaria Center (ALC) y la Universidad de Columbia de Nueva York sobre el futuro de la comarca evidencian claramente que la ubicación del museo proyectado por el Guggenheim en Murueta es «una cuestión central» y genera un rechazo «transversal» en la zona.
También hay una crítica generalizada a la «falta de transparencia» con la que se ha llevado todo el proceso. Las primeras reacciones no han tardado en llegar: tanto EH Bildu de Bizkaia como Greenpeace han exigido a las instituciones competentes el respeto a la voluntad de la ciudadanía, expresada en este proceso de escucha.
Itziar Moreno y Gorka Espiau, codirectora y director, respectivamente, de Agirre Lehendakaria Center, han presentado en Gernika un avance de los resultados que se desprenden de la primera fase de un proceso de escucha realizado en Busturialdea y Urdaibai sobre sus problemas y su futuro, en el que hasta la fecha se han realizado más de 500 entrevistas individuales, cinco sesiones de contraste o interpretación colectiva y un mapeo de agentes e iniciativas, con el objetivo entender la profundidad del debate.
Murueta, punto de «fricción simbólica»
El proceso de escucha ha identificado cinco patrones narrativos donde se plasman las distintas formas de posicionarse, tanto ante el propio proceso como ante el futuro de la comarca. De esos cinco, dos son claramente en contra de la ampliación del Guggenheim en Urdaibai; otro está a favor; un cuarto no tiene una posición definida y un quinto cree que la decisión está ya tomada por las instituciones y se muestra escéptico con el proceso de escucha.
No se han dado números concretos sobre cuántos de los consultados están en cada uno de los grupos, aunque los testimonios sí se puede consultar en su plataforma digital, pero se constata que hay una preocupación común o transversal: la ubicación elegida en los astilleros de Murueta.
«La posible ubicación del museo es una cuestión central. El proceso de escucha –apunta el informe– ha permitido constatar que no hay una oposición frontal a la posibilidad de desarrollar nuevas infraestructuras culturales. Sin embargo, la ubicación de Murueta genera rechazo de manera transversal en diferentes perfiles y se ha convertido en un punto de fricción simbólica, cargado de valores ambientales, históricos y emocionales para la comunidad. Repensar la localización, dimensión y naturaleza de las posibles ubicaciones del museo permitiría reiniciar el debate».
Gorka Espiau ha abundado en la importancia de considerar a Murueta «no como un lugar físico, sino un espacio simbólico cargado de significados colectivos». En este sentido, se hace difícil pensar que, por mucho que se explique cómo va a ser el museo, vaya a cambiar la convicción de que este lugar tan simbólico deje de estar protegido.
Hay otros puntos interesantes en las conclusiones de este primer informe: por un lado, que no se haya recogido ningún testimonio contrario a la protección de la Biosfera de Urdaibai, como sí hubiera pasado en otra época, cuando se veía como freno para el desarrollo –es decir, no hay negacionismo medioambiental en la zona–; y, por otro, que hay una coincidencia general en que «no ha existido la suficiente información sobre el proyecto y que es necesario replantear la forma en la que se abordan este tipo de iniciativas».
También es interesante constatar la crisis del modelo actual de turismo en la opinión pública, reflejada también en este informe.
Encargado por la Diputación de Bizkaia, este es un proceso de escucha no vinculante. Pero los resultados son contundentes. La pelota está ahora en el tejado de la Diputación y el Patronato del Guggenheim.
Preguntado sobre cuál debiera de ser la actitud de las instituciones, Espiau ha apuntado que, en la segunda fase del estudio que se inicia ahora y que finalizará en diciembre, se recogerán también las reacciones que provoquen en la zona la respuesta institucional al proceso de escucha.
También se recogerán otras narrativas que les faltan –se ha citado concretamente a personas migradas, jóvenes, mayores y gente de la cultura– y para finales de año está prevista la celebración de un congreso internacional.
EH Bildu pide que se respeten las conclusiones
Para EH Bildu Bizkaia, «el proceso de escucha y los trabajos vinculados al plan estratégico para el desarrollo de la comarca han caminado en paralelo» cuando, en su opinión, «deberían interconectarse». Un plan estratégico para Urdaibai que, añade, «es fruto de un proceso escaso en participación y los proyectos presentados son los mismos que las instituciones gobernadas por el PNV llevan más de veinte años prometiendo para la comarca y que además no responden a los retos actuales.
Respecto al informe confeccionado por ALC, EH Bildu destaca, por un lado, que todas las narrativas coinciden en que «durante los últimos 10 años ha cambiado la manera en la que la sociedad vasca entiende el valor del turismo, no solo en Urdaibai. Si hace una década atraer visitantes a una comarca en desarrollo era interpretado positivamente, en la actualidad existe una visión mucho más crítica sobre los impactos reales que genera. Lo que antes era sinónimo de prosperidad –añade–, hoy genera dudas y resistencias por su impacto directo en vivienda, movilidad, servicios y cohesión social».
Otra cuestión candente es, explica, el rechazo general a la ubicación del proyecto de museo Guggenheim «por sus graves afecciones medioambientales, así como una crítica generalizada a la falta de transparencia». En este sentido, añade, «estas primeras conclusiones son tan contundentes que, desde EH Bildu, exigimos a las instituciones competentes –Diputación de Bizkaia, Gobierno Vasco y el Patronato del Guggenheim–, que respeten la voluntad mayoritaria que se está expresando de manera nítida. El futuro de Urdaibai y de Busturialdea debe decidirse junto a la ciudadanía y los agentes sociales a través de un plan estratégico que defina el modelo de desarrollo local de la comarca y que respete de manera escrupulosa el medioambiente».
Greenpeace y la importancia de Murueta
Greenpeace también ha exigido a las autoridades vascas y estatales, así como al propio museo, que «escuchen el ‘No’ de la ciudadanía y frenen la ampliación del Guggenheim en Urdaibai». En este sentido, recuerda que «Murueta es zona núcleo de la Reserva de la Biosfera y, además de otros valores sociales, culturales, políticos o identitarios que se le otorgan en el informe, está protegida por la propia ley de Urdaibai, la Red Europea Natura 2000 de espacios protegidos y por el convenio Ramsar de humedales de importancia internacional. Razones suficientes –en opinión de la organización ecologista– para evitar que una de las dos sedes se construya en Murueta y para descartar la construcción de la parte final de la pasarela».
La organización ecologista subraya que «solo una de las cinco narrativas recogidas en este informe está a favor de la ampliación, mientras dos están en contra y otras dos muestran la falta de información y de participación de la ciudadanía en el proyecto» y expresa un deseo: que, al finalizar el proceso de escucha, las distintas administraciones tengan en cuenta estas entrevistas y las más de 90.000 firmas recogidas por la organización contra el proyecto.