Iñaki  Iriondo
Cronista político

Bingen Zupiria se propone combatir la percepción de inseguridad que ve en la CAV

El consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha afirmado que «la percepción es parte de la realidad y debemos afrontarla. No nos conformamos con que los datos muestren una Euskadi más segura que otros ámbitos de nuestro contexto. También es nuestra labor aumentar la sensación de seguridad».

El consejero Bingen Zupiria enumera las intenciones de su Departamento, observado por Julen Arzuaga.
El consejero Bingen Zupiria enumera las intenciones de su Departamento, observado por Julen Arzuaga. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

La derecha política y mediática ha conseguido fijar el marco de prioridades del Departamento de Seguridad y centrarlo en que –según algunos discursos escuchados este miércoles en el Parlamento– las capitales vascas parecen el Bronx. Y a pesar de que los datos indican que las estadísticas de delitos en la CAV son menores a los de su entorno, se ha extendido una percepción de inseguridad.

El consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha pasado este miércoles por la Cámara autonómica para exponer las prioridades de su Departamento para la próxima legislatura y entre ellos ha destacado el de la percepción ciudadana. Ha explicado que «la percepción es parte de la realidad y debemos afrontarla como un reto más. No nos conformamos con que los datos muestren una Euskadi más segura que otros ámbitos de nuestro contexto europeo o internacional. También es nuestra labor aumentar la sensación de seguridad en Euskadi».

Y para ello ha expuesto que «la Ertzaintza, con el impulso de este Gobierno, está firmemente comprometida con las tareas de prevención y persecución de los delitos. Y trabaja para evitar la impunidad de quien delinca. Es objetivo principal de este Gobierno lograr una convivencia pacífica y sólida en nuestro país y esto pasa también por poner medios y recursos para atajar la delincuencia».

En su intervención, el consejero ha anunciado que en las próximas semanas se producirá «un cambio pausado» en el Departamento, que pasará a tener únicamente dos viceconsejerías, una de seguridad, a cuyo frente estará Ricardo Ituarte, y otra de Protección Civil, que dirigirá Joana Egiluz. Esto responde al esquema de «Security eta Safety», ha explicado Zupiria, quien ha asegurado que «estamos para ayudar a la ciudadanía. Ayudar a quien lo necesite. Ese es el fin último de este departamento con la Ertzaintza como una de sus principales herramientas».

«La mayor parte», comprometidos con el servicio público

En cuanto a los conflictos internos en la Ertzaintza, el consejero ha afirmado que «dar respuesta a las necesidades de la ciudadanía desde un ambiente enrarecido o convulso no facilita nuestra labor». Por ello  se ha comprometido «a abordar, con el mejor de los talantes y la máxima dedicación» el «diálogo y el pacto sobre el Acuerdo Regulador de las Condiciones de Trabajo de la Ertzaintza. Y en este marco, avanzar en la actualización de sus condiciones de trabajo y el sistema de desarrollo profesional del personal de la Ertzaintza».

Ha llamado la atención que el consejero Bingen Zupiria haya dicho, como llevaba escrito en su discurso, que «la mayor parte de las y los ertzainas están comprometidos con este servicio público, están comprometidos con la sociedad a la que sirven, y lo hacen a través de su profesionalidad y desempeño».

El consejero ha dicho que «la mayor parte de las y los ertzainas están comprometidos con este servicio público», lo que no ha tranquilizado mucho a Arzuaga (EH Bildu)

De hecho, el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga ha apuntado que «esa afirmación no me ha tranquilizado mucho», puesto evidencia que hay una parte, aunque sea menor, que no están comprometidos con el servicio público. El consejero no ha dado ninguna explicación sobre ello en su turno de respuesta.

Tampoco ha respondido a los requerimientos de Arzuaga sobre si va a corregir actitudes de su predecesor, Josu Erkoreka, de dificultar la tarea de control del Parlamento enviando respuestas llenas de tachones o entorpeciendo el acceso a la información.

Arzuaga ha explicado al consejero que «cuando tenemos buena información, cuando tenemos explicaciones, cuando vemos que se toma la acción, que se interviene por parte del Departamento, cuando se afrontan los problemas, cuando tenemos confianza en la intervención del gobierno... también aplacamos la crítica. Si vemos que tienes la disposición de afrontar los problemas, puedes contar con nosotros».

Disposición de EH Bildu a acordar como en Bilbo

El parlamentario de EH Bildu ha dicho también haber visto «con envidia» el proceso que se ha dado en el Ayuntamiento de Bilbo para llegar a un convenio de seguridad, al que su grupo hizo aportaciones y firmó, mientras otros, en referencia al PP, «prefieren hacer populismo punitivo». Ha recordado que el propio consejero estuvo en la firma del acuerdo y Arzuaga se ha preguntado por qué lo que se puede debatir y negociar, no es posible hacerlo con la Ertzaintza en el conjunto de la CAV.

Bingen Zupiria ha mostrado su total disposición al diálogo, aunque le ha espetado a Julen Arzuaga que EH Bildu no es solo un grupo de oposición, sino que también gobierna «en 107 ayuntamientos», muchos de los cuales cuentan con policías municipales. Y en opinión del consejero, firmar acuerdos entre la Ertzaintza y esos cuerpos locales es también una vía para llegar a acuerdos más globales.

Arzuaga ha contestado que esos pactos deben hacerse en base a contenidos y no tratando a la policía municipal como un cuerpo subordinado. Y ha explicado que allí donde gobiernan, con Iruñea como ciudad más grande, tratan de hacer las cosas de otra forma en la medida de lo posible.

En su intervención, EH Bildu le ha expuesto al consejero que «quiere una policía que se comunique con el pueblo, que hable al pueblo, que le diga y le demuestre que aunque tenemos (y tendremos) problemas puntuales de seguridad, algunos con mucha proyección mediática, lo cierto es que vivimos en un pueblo seguro. Los datos de seguridad, las estadísticas de delitos, el número de denuncias e intervenciones... indican que este país no corre graves riesgos, que tenemos capacidad para afrontar los retos de seguridad desde un servicio público moderno... En eso nos encontrará, consejero. Con honestidad y transparencia».

La derecha a lo suyo y la apostilla del PSE

PP y el Grupo Mixto-Vox se han centrado en los datos de incremento de los delitos y la falta de medios y agentes de la Ertzaintza para hacerle frente. La ultraderechista Amaia Martínez ha exigido al consejero que se dote a los ertzainas de pistolas taser. Bingen Zupira le ha afeado que «juegue a policía» y le ha dicho que hay que «respetar la profesionalidad de quienes toman las decisiones con criterios profesionales. A ellos les corresponde decidir cuál es el equipamiento que la Ertzaintza».

En cuanto a la insistencia de Ainhoa Domaica, del PP, con los datos de incremento de delitos, Zupiria le ha recordado que todas esas estadísticas se las ha dado el propio Departamento, y le ha dicho que si ella fuera la alcaldesa de Gasteiz, con esos mismos datos estaría presumiendo de ellos, por ser más bajos que lo de sus alrededores. Domaica le ha contestado que la labor del consejero no es hacer comparaciones sino tratar de que los delitos sean cada vez menos.

De la intervención de Miren Gallastegi, del PSE, se puede destacar su empeño en mostrar que los planes que ha expuesto el consejero son parte del pacto firmado con su partido y que llevaban en el programa electoral. Y también ha querido apostillar a Bingen Zupiria que si bien es cierto, como había dicho, que la Ertzaintza es un símbolo del autogobierno, pero que también es la encargada de «garantizar nuestros derechos y libertades». El consejero ha comenzado su turno de respuestas dándole la razón.