Los líderes de la OTAN han rubricado este miércoles en La Haya su compromiso con el objetivo de gasto en defensa del 5% anual del PIB en la próxima década, en el acuerdo con el que la Alianza Atlántica ha renovado su horizonte de inversión militar acuciada por la presión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el escenario marcado por la guerra entre Rusia y Ucrania.

La declaración, firmada por los 32 jefes de Estado y de Gobierno en la reunión principal de la cumbre de la OTAN, no recoge ninguna excepción clara para países como el Estado español, que reclamaban un gasto menor, y señala que los aliados se comprometen a incrementar el gasto al 5%, debido a las «profundas amenazas y desafíos a la seguridad, en particular la amenaza a largo plazo que representa Rusia para la seguridad euroatlántica y la amenaza persistente del terrorismo».

«Los aliados se comprometen a invertir anualmente el 5% del PIB en necesidades básicas de defensa, así como en gastos relacionados con la defensa y la seguridad, de aquí a 2035, para garantizar nuestras obligaciones individuales y colectivas», expresa el documento acordado.

«Los aliados acuerdan presentar planes anuales que muestren un camino creíble y progresivo hacia ese objetivo», añade la declaración que recoge cinco puntos, y que también subraya el apoyo a largo plazo de los países de la OTAN con Ucrania, que computará en el gasto en defensa declarado por los Estados miembros.

El acuerdo contempla «dos categorías esenciales de inversión» en defensa, al menos un 3,5% «según la definición acordada del gasto en defensa de la OTAN para 2035, para financiar los requisitos fundamentales de defensa y para cumplir con los objetivos de capacidades de la OTAN». Mientras, el otro 1,5 % del PIB anual será para, entre otras cosas, «proteger infraestructuras críticas, defender redes digitales, garantizar la preparación civil y la resiliencia, impulsar la innovación y fortalecer la base industrial de defensa», según el texto, que no se extiende en detalles.

«La evolución y el equilibrio del gasto bajo este plan serán revisados en 2029, teniendo en cuenta el entorno estratégico y los objetivos de capacidades actualizados», advierte la escueta declaración.

Sánchez asegura que no gastará más del 2,1%

No obstante, el presidente español, Pedro Sánchez, ha reiterado que su Ejecutivo no gastará más del 2,1% en defensa y ha asegurado que eso permitirá cumplir sus compromisos con las capacidades de la Alianza.

Sánchez ha insistido en ese porcentaje de gasto en la rueda de prensa que ha ofrecido al término de la cumbre, que ha considerado «un éxito» tanto para el Estado español como para la OTAN, para «la seguridad de todos y para el estado del bienestar».

El acuerdo suscrito por todos los aliados avala, según ha interpretado, la posición española y que no tenga que llegar a un 5% del PIB en gasto militar. 

Rutte: «Tiene que ser el 3,5%»

Preguntado al respecto, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ha dicho que es seria en cuanto a su compromiso de gasto militar, aunque ha reiterado que tendrá que dedicar el 3,5% como el resto miembros de la Alianza Atlántica.

«Estamos de acuerdo en el desacuerdo», ha resumido Rutte en rueda de prensa sobre el choque con Sánchez.

Así, ha insistido en que mientras el Estado español cree que puede alcanzar los objetivos de capacidades con un 2,1%, la OTAN «dice que tiene que ser el 3,5%, como para todos los demás aliados», ha subrayado el secretario general aliado.

Sin entrar en más valoraciones, Rutte ha señalado que «todos los aliados informarán sobre cómo están alcanzando los objetivos de capacidad» en una serie de informes anuales, así que la OTAN podrá ver la evolución de gasto de los socios.

Trump amenaza a Madrid

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado al Estado español con represalias comerciales por no comprometerse con el gasto militar del 5% del PIB.

«España es terrible lo que han hecho, son el único país que no pagará al completo», ha criticado el mandatario estadounidense al término de la cumbre, quien ha asegurado que le hará «pagar doble».

Según Trump, la actitud del Gobierno de Madrid supone aprovecharse de la inversión del resto de aliados. «No voy a permitirlo, es injusto. Tendrán que devolvérnoslo con el comercio», ha advertido.