La temporada 2014/15 terminaba con un nuevo draft, celebrado en el Barclays Center de Brooklyn. El ala-pívot Karl-Anthony Towns, elegido por los Minnesota Timberwolves, pasará a la historia por ser «el primero de la clase» de 2015.

No dejó de ser un draft algo atípico, con seis opciones por parte de los Sixers de Philadelphia o un número dos de Los Angeles Lakers, su elección más alta desde que eligieron a James Worthy en 1982. Eligieron al base de 19 años D’Angelo Russell, un «ganador» que esperaba «aprender a ganar bajo el ala de Kobe Bryant», según sus primeras impresiones. No dejó de ser una sorpresa, ya que los californianos lo preferían al pívot Jahlil Okafor, campeón mundial u19 y de la NCAA con Duke, y que acabaría en los Sixers, como tercera elección del draft.

Pero ante todo, destacaba que, con Towns, los Timberwolves van a reunir en su plantilla las primeras elecciones de 2013 y 2014 –los canadieneses Anthony Bennett y Andrew Wiggins–, amén de la de 2015. Una responsabilidad para una gente joven que, con la adquisición del «hijo pródigo» Kevin Garnett, debe levantar una franquicia muy castigada por las lesiones y la marcha de Kevin Love la pasada temporada.

«Cuando vi salir al comisionado –Adam Silver–, realmente me puse muy nervioso. No podía resistir la angustia antes de que se hiciera el anuncio, y creo que después de que me anunciaran aún sigo nervioso, porque es una gran responsabilidad estar en un gran equipo como los Timberwolves», dijo Towns al término de la ceremonia. «Haber seleccionado a Towns ha sido una de nuestras mejores decisiones», añadía a su vez el presidente y entrenador de Minnesota, Flip Saunders.

Pitos y otros jugadores

El momento más polémico de la noche llegaba tras la elección de Okafor. Desde que eligieran a Pat Ewing en el número 1 del draft de 1985, los Knicks tenían en este cuarto lugar su elección más alta. Y Phil Jackson sorprendió a propios y extraños al optar por el espigado ala-pívot letón de Baloncesto Sevilla Kristaps Porzingis. La numerosa hichada neoyorquina prorrumpió en una pitada histórica, aunque Porzingis, mostrando un buen nivel de inglés, mantuvo el tipo.

«Reconozco que muchos aficionados no están contentos con la decisión de los Knicks. Pero lo que tengo que hacer es dar todo lo que deba dar para convertir esa inconformidad en aceptación», indicó.

Mario Hezonja, elegido en quinto lugar por los Orlando Magic, fue otro de los europeos ilustres, aunque su marcha del Barça está en el aire, toda vez que el propio jugador tendrá que abonar 1,2 millones de euros por su «libertad».

La elección más exótica llegaba en la elección número 52, cuando los Mavericks se hacían con el pívot Satnam Singh Bhamara, primer indio drafteado de la historia. Mientras que el jugador referencia del basket vasco, Dani Díez, ex de GBC y pretendido por Saski Baskonia, salió elegido por Utah Jazz en el puesto 54, para traspasarlo acto seguido a los Portland Trailblazers.