El presidente del consejo local de los barrios rebeldes de Alepo Oriental, Brita Hagi Hassan, imploró la apertura de un «corredor seguro» para las decenas de miles de personas, 50.000 según el último recuento, que huyen de la ofensiva de las ropas sirias y sus aliados. «250.000 civiles están amenazados de muerte, En los barrios conquistados por el régimen y las milicias iraníes hay ejecuciones sumarias, ajustes de cuentas... todos los hombres menores de 40 años son detenidos. El régimen practica la política de tierra quemada», denunció Hassan en París, en un encuentro con el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Marie Ayrault. «En nombre de la Humanidad, dejen que los civiles huyan a donde quieran. ¿Cómo se les puede obligar a refugiarse donde están sus verdugos?», inquirió Hassan, que salió hace meses de Alepo y desde entonces no ha podido regresar. El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos denunció asimismo cientos de detenciones y cifró en más de 300 los desaparecidos.

Una fuente militar siria negó esas redadas masivas y matizó que se comprueban las identidades de los que abandonan las zonas rebeldes y que cualquier desconocido es trasladado a «lugares específicos». Esa misma fuente concretó que es lo que ocurre con los milicianos que han huido con ellos.

En esta coyuntura, las facciones rebeldes no se retirarán y planean luchar hasta el final, aseguró Zakaria Malahifji, jefe de la oficina política del grupo rebelde Fastaqim. «He hablado con todas ellas y han dicho que no se retirarán y otras cosas podrían ocurrir», evocó, sin dar más detalles.

Por contra, el miembro de la oficina política del Movimiento Nuredín al Zinki, Yaser Yusef, señaló que los rebeldes carecen de estrategia. «Siendo sincero, no existe ninguna estrategia; estamos luchando para defender a nuestra gente con armas muy simples bajo los barriles de explosivos y armas químicas».

«Hablar de nosotros como un ejército organizado con dinero es un lujo de los medios de comunicación», señaló, para augurar que «el régimen no parará hasta acabar con todo». Damasco anunció haber tomado el control del barrio Sheij Said, en el sureste de Alepo.