Para todos igual
Ninguna novedad y cero sorpresas en la reacción del gobierno del PP ante el anuncio del desarme de ETA. Como mucho, les felicitaremos por la inventiva demostrada al pasar de tregua-trampa, a desarme-trampa. Y como poco, nos acomodaremos para disfrutar de la soltura con la que hablan de trampas, ellos: los grandes artífices del fraude, la mentira, las farsas y las ficciones. A Mariano Rajoy, que cosechó un éxito épico hablando de alcaldes elegidos que elegían vecinos que eran elegidos por los alcaldes, no le ha temblado esta vez ni el pulso ni el discurso: lo que tiene que hacer ETA y bla, bla, bla, es esto y lo otro y lo de más allá y «someterse a la ley, porque la ley –pásmense!– es igual para todos». Se ve que para Rajoy, hablar alegremente de dar portazos al proceso de paz, es mucho menos complicado que hablar de la mecánica de las urnas. Y acometer las mayores mentiras, con el tono y el empaque de las grandes verdades, tampoco entraña para él ninguna dificultad. También será cosa de reconocer que, si con lo de los vecinos y el alcalde nos reímos todos, con lo de la ley igual para todos, le ha tocado reírse a él. Tampoco es novedad, lleva riéndose desde que volvió a sentarse en el sillón presidencial. Él y todos los que saben que, para ellos, la ley es mucho menos igual que para todos los demás.

GARA es segundo en Gipuzkoa y NAIZ sigue creciendo con fuerza

«Goonietarrak», 40 urte: bihotzeko ganbaran gordetako altxorra

«Elektronika zuzenean eskaintzeko aukera izango dugu orain»

«Gizarte aldaketa handi bat» eskatu du euskararen komunitateak
